Navacerrada, pedanía de Almodóvar del Campo, viene viviendo con entusiasmo sus tradicionales fiestas de enero en honor a la Virgen de la Paz, patrona de la localidad, con actos que hacen posible el Ayuntamiento y gran la implicación de los vecinos.
Hoy sábado culmina la programación de actividades religiosas y lúdicas, después de que ayer tarde se viviera los momentos más grandes de las celebraciones, desde que a las 19 diera comienzo la solemne función en honor a la patrona.
Seguidamente tenía lugar la procesión en la que se siguió el tradicional itinerario por distintas calles de la población para, al compás de los acordes musicales, ser acompañada desde el fervor y la devoción por una numerosa comitiva de personas.
Entre ellas, distintos representantes de la Corporación municipal, como la teniente de alcalde Carmen Santos o el alcalde pedáneo, Raimundo Díaz Moreno, así como el nuevo sacerdote para esta pedanía Gabriel Rojas Gutiérrez.
Y a destacar que, a la llegada de regreso al templo de la Virgen de la Paz, tenía lugar la tradicional subasta de puestos para llevar a la patrona en su carroza y de los ramos de flores ofrecidos en su honor, logrando recaudar un total de 1.535 euros.
Castillo de fuegos artificiales
Asimismo, tras la procesión un castillo de fuegos artificiales iluminó el cielo de Navacerrada y, acto seguido, se pudo disfrutar también de un vino de honor en el Teleclub, ofrecido por el Ayuntamiento de Almodóvar del Campo.
Para poner el broche a esta jornada central de las celebraciones de enero en Navacerrada, la orquesta Trío Pasión amenizó una verbena popular que, desde las diez de la noche, se prolongó para alargar la convivencia festiva.
El martes a la tarde empezó el programa con misa ‘pro populo’ que Gabriel Rojas, de 26 años de edad y natural de El Torno, como nuevo titular de la unidad de acción pastoral en la zona de Abenójar, ofrecía por Navacerrada como pueblo al que tiene confiado su casi recién estrenado ministerio sacerdotal. Y el miércoles, eucaristía para unción de enfermos.
Corte y recogida de leña
La jornada de vísperas, la del jueves día 23, estuvo marcada por la tradición con el corte y recogida de leña como ofrenda a la Virgen de la Paz desde las nueve de la mañana, seguido de un almuerzo campestre a mediodía.
Por la tarde, el templo de Navacerrada volvía a reunir a los fieles de la pedanía, también a las cinco de la tarde para, completando un particular triduo religioso, ofrecer misa y rezos por los difuntos del pueblo, tras lo cual se llevó a cabo la ofrenda floral a la patrona.
Y en torno a una hora y media más tarde, se compartía la tradicional candelaria en honor a la Virgen de la Paz, con toda la leña que se había aportado y pese a las inclemencias de la lluvia.
Este sábado 25 de enero, las fiestas llegan a su fin con el denominado ‘remate de aceitunas’, cita que tiene lugar desde la una de la tarde en el teleclub y donde las personas asistentes van disfrutar de cañas, tapeo y la música de la orquesta Bámbola.