El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha podido conocer esta mañana en el Hospital General Universitario de Ciudad Real el funcionamiento del nuevo brazo robótico inteligente Mako, una herramienta de última generación que marca un antes y un después en la cirugía ortopédica de la región. Este dispositivo robótico está diseñado específicamente para la implantación de prótesis de cadera y rodilla, ofreciendo a los pacientes un nivel de precisión, personalización y seguridad sin precedentes.
El Mako permite a los traumatólogos planificar las intervenciones con antelación mediante un TAC preoperatorio, lo que asegura que cada prótesis se adapte de manera exacta a la anatomía única de cada paciente. Durante la operación, el robot guía a los profesionales en tiempo real, optimizando la colocación de los componentes de la prótesis y reduciendo el daño a las partes blandas que rodean la articulación.

Pedro Zorrilla Ribot, jefe del Servicio de Traumatología del hospital, resaltó que este sistema supone un avance extraordinario en la calidad de las intervenciones quirúrgicas, ya que serán más precisas, personalizadas y seguras, lo que permitirá una recuperación mucho más rápida y menos complicaciones postoperatorias,
Beneficios para los pacientes de cadera y rodilla
Zorrilla Ribot ha detallado los múltiples beneficios de esta tecnología, que permite reducir complicaciones como las derivadas de las transfusiones de sangre, una de las principales causas de infección en prótesis, y se reduce al mínimo el riesgo de aflojamiento o desgaste de los componentes debido a la perfecta alineación que proporciona el sistema.

Además, el especialista ha señalado que esta precisión permitirá implementar un modelo de alta precoz para la mayoría de los pacientes, reduciendo la estancia hospitalaria de tres días a menos de 24 horas en muchos casos.
En una primera fase, se estima que el robot permitirá realizar unas 200 intervenciones anuales de prótesis de cadera y rodilla, con los primeros pacientes ya programados para realizarse el TAC en los próximos días y comenzar las operaciones a finales de mes.
Un modelo sanitario que apuesta por la innovación
Por su parte, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández ha resaltado la incorporación de esta tecnología como un paso más en la estrategia de modernización del sistema sanitario de Castilla-La Mancha.
Según Fernández, el brazo robótico de Ciudad Real es un reflejo del compromiso de la región con la innovación y la salud de precisión. “Desde que Emiliano García-Page asumió la presidencia en 2015, hemos trabajado en varias etapas: primero la recuperación del sistema sanitario, luego la consolidación, que el covid nos paró, y en la que estamos ahora, apostando por la innovación”.
El consejero ha recordado que la inversión en sanidad ha crecido un 64% desde 2015, permitiendo que cada ciudadano de Castilla-La Mancha disponga de una cobertura sanitaria de casi 2.000 euros anuales. “Hoy inauguramos un robot que no solo representa tecnología de vanguardia, sino también el compromiso de seguir avanzando en salud de precisión, donde cada paciente es único y cada intervención está perfectamente adaptada a sus necesidades”, añadió Fernández.
Una apuesta integral por la tecnología sanitaria
El Hospital de Ciudad Real es el séptimo centro público del país, primero de Castilla-La Mancha, en el que se instala el brazo robótico Mako. Ha supuesto una inversión de 1,2 millones de euros.

En esta línea, Fernández recordó que en la región se están implementando quirófanos híbridos, además de robotizar los laboratorios de todos los hospitales. También recordó que Alcázar de San Juan cuenta con el brazo robótico Rosa y que ya se trabaja en la implantación de la tecnología robótica en otras áreas quirúrgicas, como urología y ginecología.
En total, la región ha invertido más de 500 millones de euros en alta tecnología sanitaria en los últimos años, en los que se incluyen los 8,5 millones para quirófanos híbridos y casi 35 millones en la modernización de laboratorios.