Más de un centenar de escolares de Primaria aprovechan las mañanas laborales de este verano en la nueva edición que viene desarrollando el Ayuntamiento de Argamasilla de Calatrava en el Colegio ‘Rodríguez Marín’.
Distribuidos por grupos de edad y atendidos por un equipo de monitores titulados la iniciativa supone compatibilizar una experiencia educativa y lúdica entre los menores, a la par que facilita la conciliación familiar y laboral de sus progenitores.
El tema central del Campus Urbano está siendo el ‘Geoparque: una mirada inclusiva desde la diversidad del territorio español’, con un enfoque especial en el Geoparque ‘Campo de Calatrava’ recientemente reconocido por la UNESCO a nivel internacional.
Por eso se realizan diversas actividades como la comprensión de qué es un espacio geológico de estas características, a través de conceptos, visitas virtuales, carteles y presentaciones.
Los niños vienen así explorando los distintos enclaves y sus principales localidades, la flora y fauna y experimentos para aprender sobre el ciclo de las rocas, las capas del suelo, los volcanes, las placas tectónicas, la porosidad, las aguas subterráneas, entre otros.
El programa también incluye actividades sostenibles como juegos de ‘suaviball’, zancos, orientación y retos recicladores, así como juegos populares y tradicionales castellano-manchegos y otros juegos infantiles.
Las manualidades también están siendo otra parte importante, con actividades como la construcción de mapas, la creación de fósiles, pintura de paisajes y fabricación de brújulas, además de propuestas cooperativas.
De especial interés están siendo asimismo dos talleres de yoga, uno para participantes de Infantil y otro concebido para los cursos de Primaria, de manera que se procura una suerte de rutinas de relajación y bienestar físico y mental.
“Como es habitual, nuestro Campus Urbano es una escuela de verano que va mucho más allá de una mera guardería, al ser un espacio de motivación lúdica, aprendizaje y convivencia”, explica la edil Ana Belén Sáez, quien ha tenido ya ocasión de comprobar “el buen hacer del equipo de profesionales que lo está llevando adelante”.
La edil pone en valor el hecho de trabajar aspectos “como la socialización, la educación en valores y la valoración del entorno, ofreciendo así una alternativa educativa y recreativa durante las vacaciones escolares”.
El Campus Urbano rabanero persigue por tanto objetivos clave como desarrollar valores de tolerancia y empatía, aumentar la autonomía y desarrollo de los niños y niñas o desarrollar hábitos sostenibles con el medio ambiente.
