Algo que les ha dado pie para aprender conocimientos, antiguos utensilios, costumbres, etcétera, gracias a las facilidades que también ha prestado la plantilla del Servicio de Prevención de la Dependencia (SEPAP).
Toda una suerte de taller intergeneracional para acercar a los niños a las personas de edad, una idea que acogieron con agrado y que ha sido muy valorado por mayores de la localidad, donde interaccionan con mayore y compartan talleres comunes.
En esta ocasión han sido menores de 3, 4 y 5 años, que bailaron temas de la época de las personas mayores, fueran tangos o piezas tan conocidas como ‘La chica ye-ye’, cantando canciones y finalizando con una actividad conjunta de psicomotricidad.
A la hora de la despedida, los mayores del SEPAP fueron agasajados con notas de cariño enmarcadas en corazones de papel que les dedicaron los alumnos de Infantil del ‘Rodríguez Marín’.
Experiencia que, como se subraya desde la Concejalía de Bienestar Social, fue todo un éxito, estimando este tipo de actividades educativas por valores como son el respeto, la empatía, el cariño entre niños y mayores y la transmisión de conocimientos y valores.
