El alcalde de Arroba de los Montes, Antonio López Herance, asegura que los casi 500 vecinos de la localidad “en su inmensa mayoría, casi al cien por cien, han cumplido con las normas que exigía Sanidad” en lo que se refiere al estado de alarma y el confinamiento por la crisis sanitaria del coronavirus.
En declaraciones a Lanzadigital.com, el alcalde resalta que “no hemos tenido ningún problema en ese aspecto”.
La incidencia de la enfermedad en la población se ha quedado reducida a un fallecido y “no sabemos cómo vino”, señala, en referencia al origen de ese único contagio.
Inicialmente, cuenta López Herance, el confinamiento “fue total” y, posteriormente, a medida que fue pasando el tiempo y la cosa se fue relajando la gente iba a sus huertos, a sus pequeñas explotaciones agrarias “que les sirve para complementar su sueldo”, explica el alcalde.
El alcalde recuerda que, incluso antes del confinamiento, personas nacidas en Arroba, pero que viven fuera, vinieron a sus casas en la localidad y han pasado allí el confinamiento.
“Algunos vinieron de fin de semana, les pilló aquí y aquí lo han pasado y sin problemas ninguno”, señala el alcalde. “No es lo mismo pasar el confinamiento en un piso de 70 metros cuadrados, que en una vivienda unifamiliar, que tiene patio”, reflexiona López Herance.
En lo que se refiere al proceso de desescalada, señala que la amplitud de espacios en el pueblo, con tantos caminos, “está siendo más llevadero, porque todo es más sencillo en un pueblo pequeño”.
Medidas
La primera medida que se tomó desde al Ayuntamiento, cuando se veía lo que se venía encima, incluso antes el estado de alarma, fue la suspensión de las visitas a la vivienda tutelada de mayores”.
Otra decisión fue la de desinfectar las calles y espacios más concurridos tres veces en semana, algo que se hizo con voluntarios y con la ayuda de agricultores pusieron sus tractores a disposición del Ayuntamiento. “En ese aspecto –añade- todos hemos actuado como una verdadera piña”.
Con respecto a la protección de las personas, el alcalde señala que el Ayuntamiento compró la tela y que un grupo de voluntarias costureras cosieron bastantes unidades.
En principio, se repartieron a la gente mayor y, a los pocos días, se hizo otro reparto para r toda la población, mascarillas que son reutilizables, para lo que han contado con la ayuda de instituciones como la Diputación para la compra del material.
Ayuntamiento
En el Ayuntamiento, explica el alcalde, hay dos personas a tiempo parcial, una administrativa y la secretaria.
“La administrativa –dice- ha coincidido que estaba embarazada y, desde el primer momento, ha estado trabajando desde su casa y las dos personas a tiempo parcial se ha combinado para que se rotaran un día una y oro día otra para atender al público, con la mayoría de consultas por teléfono o por correo electrónico”.
El acalde remarca que “seguimos funcionando así y estamos pensando en poner unas mamparas protectoras, porque aquí, el peligro que nos puede venir de fuera y tenemos que estar protegidos”.