La organización agraria Asaja Ciudad Real ha valorado esta tarde «muy positivamente» la decisión de mantener las dotaciones para regadío de las anteriores campañas asociaciado a aguas subterráneas en el Alto Guadiana (antiguo acuífero 23). Y saca pecho de la medida en un comunicado en el que explica que hace poco dirigió escritos a la directora general del Agua del Ministerio de Agricultura Liana Ardiles y al presidente de la CHG José Martínez, solicitando esta prórroga para la campaña de riego 2018.
Ahora agradece a ambos organismos la sensibilidad de sus dirigentes ante esta respuesta y reconoce el apoyo y el trabajo realizado por los representantes de las diversas comunidades de usuarios de las masas de aguas subterráneas afectadas.
Los representantes de Asaja Ciudad Real consideran «muy justa y acertada» esta decisión, debido a que «los regantes de esta zona llevan más de 25 años realizando un gran esfuerzo y sacrificio al renunciar a la mitad del agua concedida y no podían ahora ser penalizados, máxime cuando los niveles del acuífero son superiores a los de años en los que no se plantearon restricciones de riego».
Cualquier restricción supone un grave perjuicio
Desde Asaja indican que con las dotaciones actuales, «cualquier restricción de agua contemplada en el plan de extracciones hubiera supuesto un grave perjuicio económico para los agricultores de la zona, así como para las localidades afectadas, donde el sector agrario tiene una gran importancia socioeconómica».
Por último insisten en la línea que mantienen los representantes de las masas de agua y que defendió Pedro Barato, el presidente nacional la semana pasada, de reclamar a las administraciones más infraestructuras hidráulicas en el Alto Guadiana.
