Como consecuencia de la fuerte subida a aplicar por el Consorcio RSU, dependiente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, para el servicio de recogida de basuras en 2020, y de la negativa a estimar las reiteradas reclamaciones del ayuntamiento de Bolaños a la Agencia del Agua de Castilla la Mancha, dependiente dela JCCM, solicitando un liquidación más justa por el servicio de depuración de aguas, obligarán al ayuntamiento a modificar las tarifas de estos servicios para evitar que sean fuertemente deficitarios.
BASURA AÑO 2020
En la última reunión del Consorcio de Recogida de Residuos Sólidos Urbanos, RSU, dependiente de la Diputación Provincial de Ciudad Real, se aprobó la subida de la facturación al ayuntamiento de Bolaños, ya que según este consorcio nuestro pueblo estaba pagando una cantidad por habitante y año muy inferior a la de la mayoría de las poblaciones que también reciben el servicio de este consorcio. Concretamente este incremento será del 22,19%, 62.763,52€ más. Cantidad que habrá que repercutir a los abonados del servicio en todos los conceptos tarifarios de esta ordenanza. Como ejemplo, esta subida, supondrá para el caso de las viviendas un incremento de la tarifa anual desde los 52,05€ anuales en 2019 a los 63.6 € en 2020.
DEPURACIÓN 2020
Respecto a este servicio hay que recordar que, desde junio del año 2016, la agencia del agua de Castilla la Mancha, dependiente de la JCCM, está liquidando una cantidad por metros cúbicos depurados muy por encima de los que están reflejando los caudalímetros instalados a la entrada de la planta, aproximadamente algo más del doble de lo que estos registran. Esta circunstancia ha sido reiteradamente reclamada por parte del ayuntamiento, sin que se hayan obtenido ninguna rectificación por parte de esta entidad regional, lo cual ha ocasionado un grave perjuicio económico al Consistorio, que ha tenido que asumir este exceso de liquidación, unos 140.000 euros anules durante estos años. Lo que ha obligado al ayuntamiento a interponer los oportunos recursos administrativos que están pendientes de resolverse definitivamente ante la negativa de la Agencia del Agua de corregir esta situación. Mientras tanto el ayuntamiento ha estado asumiendo y pagando este exceso de facturación desde 2016, sin haberlo repercutido a la tasa correspondiente que pagan los abonados.
Esta situación obliga a modificar la tarifa de la tasa de depuración de aguas para, a partir de 2020, tratar de que esta tasa no sea tan deficitaria y no provoque los problemas de déficit que hasta ahora ha provocado desde 2016, ante la negativa de la Agencia del Agua de CLM a corregir este desequilibrio, y hasta que sea resuelto definitivamente en los tribunales.
Así, se va a producir una revisión en la cuota fija que se liquida a cada abonado, pasando la mima de los 9,58€ anuales, a los 33,47€ anuales, sin tocar las tarifas de la depuración variable, al entenderse más justo este reparto por contador y no incrementarlo por lo metros cúbicos de consumo de agua, al entender que ello penalizaría en mayor medida a familias vulnerables. Hay que tener en cuenta que la cantidad facturada por la Agencia del Agua de Castilla la Mancha al ayuntamiento es de unos 930.000 metros cúbicos anuales, cuando lo facturado a los abonados del agua por el servicio de agua potable está en el entorno de los 460.000 metros cúbicos anuales, y lo registrado en los caudalímetros de la depuradora es también una cantidad de metros cúbicos similar.
