Brazatortas se erige como referente de las reivindicaciones del sector ganadero de toda la comarca ante la aprobación, presumiblemente en el último tramo de este año, del Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Natural ‘Valle de Alcudia y Sierra Madrona’ y para el cual este jueves se reunió una treintena de profesionales en dependencias municipales.
Convocados por la Fundación Savia a la que la Junta de Comunidades ha encomendado llevar a efecto el proceso de participación ciudadana previo, para así recabar de primera mano las aportaciones de los ganaderos al PRUG y se pueda conciliar de la mejor manera sus reivindicaciones, durante tres horas se prolongó el encuentro, dando lugar también a una defensa de la dehesa como elemento vital para la viabilidad a futuro de la comarca en general y del Parque Natural y el asentamiento humano en particular.
En la cita comparecieron diferentes cargos municipales de la zona, entre ellos el alcalde de Brazatortas, Pablo Toledano y sus homólogos cabezarrubeño y mestanzeño, Antonio Moreno y Santiago Buendía respectivamente, así como los presidentes de Savia, Paco Casero y de Acodeval, José Ramón Montoya, que también representaba a la entidad nacional Fedehesa. La presencia también del catedrático de Veterinaria de la Universidad de Córdoba Clemente Mata aportó el razonamiento academicista al debate que se suscitó.
A su término, el regidor anfitrión se mostraba satisfecho con las conclusiones alcanzadas, “muy participativas” en su opinión y llamaba a la complementariedad de todos los sectores, particularmente el ganadero y el turístico, advirtiendo no obstante que la administración competente no debe ningunear a ningún sector y, por en especial por su decisiva trascendencia, al ganadero.
Enfado del sector
Toledano, dice entender el “enfado de los ganaderos” ante decisiones discrecionales como las que por ejemplo hacen destinar medio millón de euros durante el periodo 2016-2018 al turismo y en cambio, los profesionales de la ganadería “en cambio pierden rentas” con el agravante de que “las medidas que se les aplican son restrictivas”.
Lejos de buscar enfrentamientos endógenos, “el objetivo que tenemos es hacer compatibles todos los sectores de producción, que el Parque Natural se vea como algo nuestro y que nos genere recursos de manera que el sector ganadero también lo perciba así, porque es el que ha mantenido el Valle de Alcudia tal cual lo conocemos”, si bien reconoce que las distintas administraciones deben reconocer el juego que dan estos profesionales en el mantenimiento y sostenibilidad del mundo natural y rural.
Por eso durante la jornada vespertina de trabajo del pasado jueves, se instaba a formular una PAC totalmente renovada en la que se distinga la especial idiosincrasia de la ganadería en la dehesa, a no padecer restricciones a lo que hasta ahora se venía haciendo tradicionalmente en estos parajes únicos, a reducir burocracias e, incluso, a equiparar económicamente los gastos que estos usos permiten mantener la dehesa tal cual es.
De 150 a 200 euros más por hectárea
El profesor Mata lo dejaba meridianamente claro: “Para poder mantener la dehesa en las condiciones actuales, con el manejo que tradicionalmente le hemos dado, con la riqueza de biodiversidad que tiene y que supone un manejo diario con un trabajo que ha de ser remunerado, se hace necesario una inversión de entre 150 y 200 euros más por hectárea de lo que ahora estamos recibiendo como productores”.
“Si la dehesa sigue viva, este parque natural irá cada día a más, será extraordinario, tendrá una riqueza extraordinaria, pero si sigue cobrando lo que hasta ahora y no se hace nada por mejorar, estos ganaderos abandonarán, se irán, el campo será abandonado”, advirtiendo Clemente Mata también de consecuencias progresivas como los incendios o la desertización.
Todos los asistentes convinieron en reconocer a la ganadería un papel fundamental en la viabilidad del parque natural como sostenedores de la dehesa que lo articula, por eso, añadía el catedrático, “los productores tienen que tener unos ingresos dignos y justos de acuerdo a lo que hacen y la exposición diaria que están haciendo con sus fincas”.
Discriminación positiva para el sector
José Ramón Montoya por su parte, indicaba que las conclusiones de la jornada no son sino “lo que Acodeval ya quería desde el principio, una discriminación positiva en el sentido de mantener la figura de la dehesa, que ya está suficientemente reglamentada”.
En el sentir de esta Asociación para la Conservación del Valle de Alcudia está, por boca de su mentor que la dehesa, “lógicamente al estar dentro del Parque Natural, debe recibir ayudas para que se mantenga como está y así se contribuya a su regeneración, a la mejora de los pastos y no prolifere la intensificación, que no es sino una consecuencia de la pérdida de renta que estamos sufriendo”.
Fundación Savia
Desde la Fundación Savia, encargada de recoger estas aportaciones, su presidente reconocía como “fundamental” la presencia ganadera en el contexto de este espacio, que está protegido por ley desde 2011.
Paco Casero, su presidente, insistía en que se debe “reconocer a los ganaderos que este territorio no es posible gestionarlo sin su presencia y labor, ya que su deterioro y la pérdida de las explotaciones existentes supondrá el deterioro de esa conservación que se pretende”. Algo que, añadía, es también una reivindicación constante de Fundación Savia en su objetivo genérico de “poner en valor lo rural”.
Casero, que moderó el debate y animó a los asistentes a sumar aportaciones, recuerda que la entidad que preside nació aunando a toda una heterogeneidad de sectores implicados en apreciar el valor característico de la ruralidad, con el común afán de conseguir un “sector rural vivo, dinámico y que sea atractivo para la gente joven”.
Al término de la jornada, los asistentes convinieron en la necesidad de que, al margen de las conclusiones del encuentro, siguen siendo necesarios muchos más debates en torno a estos asuntos, “porque es una problemática general que requiere de cauces donde poder hacer valer estas reivindicaciones”, decía el responsable de Savia.
Algo para lo que el consistorio torteño está dispuesto a seguir ejerciendo como foro de encuentro, tal y como también reconocía su alcalde, Pablo Toledano.
