G.M.H., un vecino de Calzada de Calatrava sin antecedentes penales, ha reconocido que hace tres años abusó de una chica de 15 años de su entorno familiar (vivían en la misma casa), con la que se relacionaba como si fuera su prima.
El acuerdo entre defensa y fiscalía, que ha evitado el juicio, incluye una orden de alejamiento de cuatro años, el pago de 2.000 euros de indemnización, y someterse a un programa de formación sexual.
En la vistilla de conformidad la fiscalía ha pedido la suspensión de la pena de cárcel, con la condición de que el joven no delinca en cuatro años.
“Está abatido”
“Está abatido, nunca crees que te puedas ver en una situación así”, ha explicado su abogado Manuel Castro. G.M.H. ha reconocido que en el verano de 2015, “en la confianza que tenía con la chica, como una prima para él”, se metió en su habitación mientras dormía y la manoseo por encima de la ropa.
La muchacha, ahora mayor de edad, vivía con su abuela y su abuelastro en una casa de dos plantas en Calzada; en la primera residía ella y sus abuelos, y en el piso de arriba el acusado (sobrino del abuelastro) con sus padres.
Tras la denuncia la menor pasó a estar tutelada por la Junta de Comunidades e ingreso en un centro de protección de menores, puesto que la abuela no podía hacerse cargo de ella, ha explicado el abogado de G.M.H. “Se ha dictado una orden de protección pero casi es innecesaria mi patrocinado no sabe ya nada de ella”, ha rematado.
