Cáritas ha salido hoy a la campaña para poner cara a las personas sin hogar, visibilizar el sinhogarismo, que lo padecen personas concretas, con nombres y apellidos.
La Plaza Mayor de Ciudad Real ha acogido la iniciativa ‘Ponle cara’ con la que la organización quiere decir basta de vulneraciones de derechos, de invisibilidad, de sufrimiento, de vivir en la calle, de inseguridad, de agresiones y de no poder acceder a una vivienda.
Durante el acto, se guardó un minuto de silencio para reivindicar los derechos de las personas sin hogar, se leyó el manifiesto de la campaña, hubo música en directo y los alumnos del FP de Integración del IES Atenea ejecutaron una dinámica para explicar las problemáticas de las personas sin hogar.
1.600 atendidos
La coordinadora del Programa de Personas sin Hogar, Carmen Nieto, detalló que Cáritas ha atendido a casi 1.600 personas en los centros los cuatro centros que tiene en la provincia. Además en torno 97.000 personas de Castilla-La Mancha están en situación de inseguridad de vivienda y 328.000 en situación de exclusión social.
En este sentido Nieto indicó que un año más salen a la calle para acercar está realidad al resto de ciudadanos y para que “pongamos rostro a las personas que están viviendo una situación que es indigna y ven vulnerados sus derechos”.
Este año la campaña se ha centrado en la prevención, “porque creemos que se pueden hacer políticas para prevenir estas situaciones y es una llamada a todas las personas que estamos implicadas en esta situación para fomentar la prevención, porque ahí es donde se puede empezar a frenar está vulneración de derechos”.
Nieto explicó que si una persona llega a quedarse sin hogar, el objetivo es que esté en el menor tiempo posible, “por todo lo que tiene de sufrimiento, por todo lo que tiene de destrucción para la persona”.
En este sentido Cáritas reclama medidas, como una garantía de ingresos mínimos y poder acceder a la vivienda. Del mismo modo también solicita espacios para las personas que salen de prisión, o que salen de hospital y no disponen de recursos, ni lugar al que ir.