Los días y las celebraciones no son nada si su significado no acaba por moldear lo que nos rodea; de ahí la necesidad de que a pesar que las reivindicaciones llenen un día en el calendario, el resto de los 364 días del año, no se escatimen esfuerzos para conseguirlo, como sucede en poblaciones como Carrión de Calatrava.
En la lucha por la igualdad, la mirada y el trabajo de las administraciones públicas se centran en los lugares donde las brechas siguen mostrándose con especial preponderancia. Como la falta de servicios públicos o como la sangría poblacional, la desigualdad entre hombres y mujeres sigue siendo más notoria en los pequeños municipios porque, entre otras cosas, la merma del patriarcado en estos entornos se sigue disolviendo a cámara lenta.
Pese a ello, el eco del feminismo ya ha traspasado las fronteras de la ruralidad en una lucha que dura décadas y que, por suerte, está dejando atisbar los primeros síntomas de una sociedad que está cambiando.
Lo sabe bien la concejal de Igualdad de Carrión de Calatrava, María Encarnación Ignacio, para quien el 8M, “debe ser el recuerdo de la lucha de muchas mujeres que durante generaciones han peleado para mostrarnos el camino y la oportunidad de acabar con las brechas a las que seguimos enfrentándonos”.
Pese a que se han dado grandes pasos hacia la igualdad real, señala Ignacio que “aún queda mucho por hacer para acabar con la violencia género o para conquistar la igualdad entre hombres y mujeres; ésa debe la motivación que nos haga trabajar con fuerza cada día”.
En su pequeño municipio dice, “la población en general está bastante concienciada sobre la necesidad de construir una sociedad más justa. Nuestro pueblo ha cambiado su mentalidad y en ese sentido, podemos afirmar que la mujer está consiguiendo tener el papel relevante que le corresponde”.
En ese camino recorrido, poner en valor la responsable de Igualdad en el consistorio, el papel de las más mayores. “Gracias a ellas sabemos lo que se ha sufrido para llegar a este momento histórico. Los jóvenes podemos reflejarnos en sus experiencias vitales para conseguir que las futuras generaciones convivan en un entorno más igualitario, donde hombres y mujeres no se enfrenten a desigualdades ni etiquetas de género”.
Educar en valores, crecer alrededor de familias donde ser niño o niña no delimite aquello que eres, o elegir lo que te gusta sin que haya un género que se imponga, sigue siendo un reto en el que el Ayuntamiento de Carrión trabaja, en la línea de lo que se lleva a cabo en otros tantos pueblos y ciudades de todo el país.
En Carrión subraya su regidora, “el 8M se vive de una forma intensa. Toda la corporación vamos a una y se dejan de lado las ideas políticas de cada grupo. Sabemos la importancia de trabajar todos juntos en problemas como éste. No podemos olvidar que en lo que va de año han sido asesinadas 9 mujeres; como no podemos olvidar la diferencia salarial, la dificultad para el acceso a ciertos cargos de representación o las brechas en las pensiones por el simple hecho de ser mujeres. Por eso es fundamental que sigamos trabajando juntos y eduquemos a los más pequeños en esta línea de tolerancia y respeto entre hombres y mujeres”.