El sindicato Comisiones Obreras (CCOO) en Castilla-La Mancha considera “esencial” acabar con la precarización laboral y apostar por la estabilización de los empleos para luchar contra la desponblación que sufre la provincia de Ciudad Real, donde el 67% de la población provincial se asienta en tan solo 13 municipios de las 102 localidades que existen.
Así lo han indicado este jueves el secretario provincial de CCOO, José Manuel Muñoz, y el secretario regional del sindicato, Paco de la Rosa, quienes han dado a conocer una serie de propuestas que les presentarán a los partidos políticos de cara a las próximas elecciones y que serán las líneas con las que trabajará el sindicato en los próximos meses.
En primer lugar, José Manuel Muñoz, responsable del sindicato a nivel provincial, ha reivindicado una mejora sustancial en el empleo de la provincia, pues ésta sigue dependiendo de sectores temporales como la agricultura o el sector servicios. Una problemática que desemboca en otra aún mayor, la despoblación. Pues la población cada vez se asienta más en los grandes núcleos urbanos dejando los pequeños pueblos, lo que puede suponer que en pocos años la provincia “se quede prácticamente vacía”.
Una despoblación que achacan a la falta de oportunidades laborales estables y de calidad que vienen dadas por la puesta en marcha de la reforma laboral que planteó el Partido Popular en los “años duros” de la crisis económica, por lo que abogan por derogarla para fomentar el empleo de calidad en todo el territorio.
Por su parte, el secretario regional del sindicato CCOO, Paco De la Rosa, ha querido dejar claro que Castilla-La Mancha y la provincia de Ciudad Real cuentan con múltiples potencialidades para crecer económicamente y plantar cara a la despoblación. Unas potencialidades que pasan por la agricultura y por la industria agroalimentaria, las cuales son los sectores e industrias que más exportan al extranjero y, por tanto, más contribuyen al Producto Interior Bruto de la región, el cual se ha incrementado en los últimos años.
Por ello, De la Rosa ha abogado por generar empleo de calidad y éste a su vez riqueza para nuestra tierra, además de la construcción de infraestructuras “esenciales” para la provincia, que plantarían cara a la despoblación y harían que no se cumplieran las previsiones del Instituto Nacional de Estadística (INE), el cual asegura que en 2030 la provincia de Ciudad Real perderá más de 35.000 habitantes. Una pérdida que se suma a las más de 85.000 personas que dejaron la provincia desde los años más duros de la crisis hasta nuestros días, de los cuales 13.000 personas se han visto obligadas a emigrar al extranjero.