La Plaza Mayor de Ciudad Real se ha pintado de colores esta tarde y ha sido escenario de la celebración por parte de numerosas familias de la lucha exitosa contra el cáncer infantil.
Entre pinturas, canciones, juegos, y música han querido conmemorar la alegría de la supervivencia, la esperanza de la curación, y la confianza en terapias cada vez más novedosas y efectivas.
Coincidiendo con la celebración del Día Internacional del Niño con Cáncer, pequeños y mayores se han unido convocados por Afanion para sensibilizar sobre el día a día de este colectivo y sobre la importancia de la atención temprana.

Antes de la suelta de globos de colores han leído un manifiesto elaborado para esta jornada en el que expresan la necesidad de seguir atendiendo a los pequeños que se han curado, con el lema en primera persona ‘No dejes de seguirme’ porque «sólo con un seguimiento continuo tras la finalización del tratamiento, podré vivir sabiendo que puedo comerme el mundo disfrutando de cada bocado. Con los cinco sentidos».
Precisamente, Isabel Sánchez Gilbert, la presidenta de la Asociación de Familias de Niños con Cáncer, ha reclamado un protocolo de seguimiento para los niños y adolescentes que han superado la enfermedad, porque las estadísticas apuntan, según ha dicho, “a los efectos tardíos a largo plazo”.

Hasta los 18 años
Prado Zúñiga, directora provincial de Bienestar Social de la Junta de Comunidades en Ciudad Real, ha celebrado el anuncio del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, este mismo viernes, sobre que el servicio de Oncohematología Pediátrica ampliará desde el próximo septiembre su atención de los 14 a los 18 años.
A su juicio, el apoyo del Gobierno de Castilla-La Mancha “no sólo es de palabra, sino también con legislación”, a tenor del compromiso del Gobierno regional para reducir a tres meses el reconocimiento de la dependencia en un procedimiento específico para niños menores de seis años. De la misma manera, ha recordado la ampliación de la atención temprana hasta los 6 años, con un nuevo modelo en el que los profesionales prestarán la atención en casa, en el colegio o en los lugares de ocio del niño enfermo.
Zúñiga ha aplaudido el acto lúdico celebrado en la Plaza para “que no se pierda la magia de la infancia y la alegría que despiertan los niños”, porque cuando llega un caso de cáncer infantil a una familia “el efecto es devastador”.
Estas políticas reflejan, en opinión, “la importancia de la infancia en la legislatura”, en la que también se va a crear el I Consejo regional de la Infancia y la Familia, donde los niños tendrán voz propia a la hora de expresar “qué quieren, qué necesitan y como quieren que los cuidemos”.
 Por su parte, Dionisio Vicente ha traslado el compromiso de la Diputación con este colectivo y ha recordado las ayudas y convocatorias de la institución, como la impresión del calendario solidario de Afanion. También ha agradecer a Afanion la invitación, a la que ha mostrado su solidaridad.
Somos lo que superamos
La alcaldesa de Ciudad Real, Pilar Zamora, también ha querido estar presente en la conmemoración y ha subrayado parte del manifiesto que señalaba “somos todo lo que superamos”, dado que «cuando superamos enfermedades nos convertimos en niños, y volvemos a ser niños y a disfrutar de las cosas como su fuera la primera vez».
Así, ha enviado un mensaje de lucha y supervivencia «fuerte» frente a una enfermedad que sufren pequeños y mayores y que «es dolorosa pero que también enseña y se aprende”.
Sobre las medidas anunciadas por Zúñiga, la primera edil ciudarrealeña se ha reconocido orgullosa “de pertenecer a un partido donde el gobierno se deja de demagogia, de palabras y lo que hace son realidades, y apoya de una manera firme todas las reivindicaciones que se hacen desde las asociaciones porque sabemos que estamos para ayudar».
De esta manera, Zamora ha mostrado el apoyo del Ayuntamiento de Ciudad Real a Afanion, quien «nos tiene a su más absoluta disposición», así como ha enviado un mensaje de esperanza para las familias y para los niños. «El cáncer no es muerte, se cura, pero tenemos que seguir mimando a los niños, porque cuando se pasa un cáncer ya la vida no vuelve a ser normal, nunca vuelves a ser lo que eras antes, pero nuestros niños tienen que volver y seguir siendo niños, y para eso nos tienen que tener a su lado”.