J. Y.
Ciudad Real
Con el lema ‘Por la educación de nuestros hijos, no al cierre de la escuela infantil Cáritas’, cerca de un centenar de personas se concentraron la tarde de este martes a las puertas del Obispado de Ciudad Real para reclamar la continuidad de la escuela infantil que gestiona Cáritas en Puertollano, con 55 plazas, y que, según los padres, se cerrará el próximo curso porque no han convocado la matrícula de ingreso.
Con la presencia de padres, sindicalistas de CCOO, trabajadoras y políticos de los grupos de la oposición en el Ayuntamiento puertollanero, la presidenta del Ampa de la escuela, Rocío Sánchez, desistió de entregar en la institución religiosa las casi 4.000 firmas que han reunido para evitar el cierre, además de otras 800 que han recabado en las redes sociales.
En medio de la protesta con pitidos y mensajes alusivos al mantenimiento del centro, Sánchez dijo a los medios que tiene la intención de entregar los apoyos este miércoles al secretario del obispo, Gerardo Melgar, dado que en la tarde de este martes sólo trabajaba el conserje.
Esta portavoz lamentó que se vaya a quedar en el paro las seis trabajadoras del centro y se hizo eco de la desinformación de los padres después de días intentando hablar con algún responsable del Obispado “para ver si nos daban alguna solución”, dado que “la junta directiva de Cáritas sólo se ha limitado a leernos el comunicado pero sin darnos explicaciones”. “Nos indicaron por teléfono que acudiéramos a Cáritas interparroquial, pero allí ya habíamos estado y no nos dan solución”.
Recordó los motivos que esgrime la institución religiosa para no seguir con el proyecto de la guardería, “primero nos dijeron que había déficit económico porque se había retirado la ayuda del Ayuntamiento de 23.000 euros, aunque la alcaldesa se comprometió con nosotros a negociar y a ayudar a las familias que lo necesiten, luego señalaron que el edificio no cumplía la normativa porque tiene 52 años de antigüedad, y no tiene salida de emergencia, ni ascensor, y después indicaron que se había perdido el fin caritativo, pero los padres sabemos que hay cariño y valores, y por eso tiene lista de espera”.
Esta portavoz apuntó la posibilidad de “que abran a más familias necesitadas (sólo hay cuatro) el centro” y así cumplir esa función social, a la vez que recordó “el devastador nivel de paro de Puertollano, con muchos niños que necesitan la ayuda, y que sólo comen los que se les da allí”. Además, alertó de la falta de plazas en las dos guarderías públicas para estos niños de familias trabajadoras.
Sánchez insistió en que la escuela infantil, muy conocida en la ciudad industrial, tiene viabilidad porque “presta buenos servicios a los padres”, con una media de 180 euros, ya que hay alumnos con matrícula gratuita y otros con el pago reducido por la situación de sus familias.