F. J. O.
Ciudad Real
“La salud laboral de Castilla-La Mancha no es buena”, concluye Raquel Payo, secretaria regional del área en CCOO, Raquel Payo. Lo hace tras analizar los datos sobre siniestralidad del año 2016, que sitúan a nuestra comunidad como la segunda peor de España, sólo por encima de Baleares, y con el dudoso honor de contar con la provincia en el que el índice de incidencias es mayor, Guadalajara.
Ciudad Real no sale tan mal parada si la se la compara con el resto de provincias castellano-manchegas, aunque no puede presumir de nada a nivel nacional. “Guadalajara es un caso aparte, especialmente porque en el corredor del Henares se concentra un gran número de empresas en las que los trabajadores realizan labores mecánicas muy repetitivas y con mucha exigencia, pero la situación es complicada en toda la región, falta inversión en previsión”, comenta Payo.
En Ciudad Real se producen 3.883 accidentes por cada 100.000 trabajadores, cerca de la media regional, que es de 4.079. Albacete es la única provincia que se ha comportado mejor que Ciudad Real el pasado año. En Ciudad Real ha habido 4.540 accidentes en jornada laboral y 333 'in itinere. “El crecimiento en Castilla-La Mancha ha sido del 10%, pero en los últimos cuatro años es del 25%. Es para estar preocupados”, comenta la secretaria general de CCOO de Salud Laboral. Y más si tenemos en cuenta que el crecimiento no es similar en el resto de España.
Sectores
Volviendo a Ciudad Real, el índice de incidencia por sectores sigue el patrón más habitual. Él más alto se da en construcción, seguido de agrario, industria y servicios, aunque como la mayor parte de la población se concentra en este último sector es en él en el que se produce el mayor número de accidentes en términos absolutos.
Otro dato que se sale de lo normal, es que el 90% de los accidentes se producen en Ciudad Real en empresas de menos de 50 trabajadores, pero esa es, más o menos, la estructura productiva de la provincia.
Un dato que escapa a la distribución estadísitica normal es del reparto de incidencias entre hombres y mujeres. En los accidentes en jornada laboral responde a lo previsto: un 72% hombres y un 28% mujeres, más o menos el mismo porcentaje de población afiliada. Pero en incidencias in itinere, es decir, en el camino al trabajo o a la salida, las mujeres protagonizan el 55% de las incidencias. “Necesitamos reflexionar sobre ello. Podría ser por la falta de conciliación familiar, pero es un dato que debemos estudiar”, comenta Payo, para quien “es hora de que los responsables políticos y los empresarios entiendan que invertir en prevención no es un gasto. La crisis se ha llevado por delante la política preventiva y tenemos que recuperarla”.
Hay que recordar, como publicó ayer Lanza que con datos del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo que van de diciembre de 2015 a noviembre de 2016, la peor comunidad es Baleares con 4.811. Madrid es la comunidad que mejor parada sale, con un índice de 2.731 según los datos ministeriales.
En definitiva, Castilla-La Mancha se produjeron 23.056 accidentes laborales el año pasado, de los cuales 22.846 fueron leves, 175 graves y 35 mortales.
“Estamos trabajando con la Administración para poner en marcha el Acuerdo Estratégico 2017-2021. A ver si conseguimos cambiar la situación”, finaliza Raquel Payo.