Abrió el acto Luis Beamud, que dio la bienvenida a todos los presentes, -más de doscientas personas-, y cedió la palabra al Presidente Diocesano de la ONGD, Pelayo Dorado, que además de dar las gracias a la dirección del instituto y a las agrupaciones musicales intervinientes, aprovechó para recordar el proyecto asumido por el Arciprestazgo de Ciudad Real en este año, -en el que se cumplen seis décadas de la fundación de la misma-, y que no pretende otra cosa que garantizar los derechos y el desarrollo de todas las mujeres, y de sus familias, de Varanasi, en la India.
El concierto
Tras este breve turno de oratoria, intervino la banda anfitriona, “Juan Manuel López”, que interpretó temas tales que “Magníficat”, de Frisina; “Zoraya”, de Flores; “Viva la vida”, de Coldplay, o el tema principal de “Gladiator”, de Zimmer, bajo la dirección de Francisco Rosal Nadales.
Sobre la misma, además de recordar que fue fundada en el año 2011, hay que decir que está compuesta por aproximadamente cuarenta miembros, -entre chicos y chicas-, y que ha actuado, hasta el día de hoy en poblaciones cómo Alcolea de Calatrava, Picón, Carrión de Calatrava, Corral de Calatrava,… por citar solamente algunos de sus “escenarios”.
En una segunda parte, y tras unos minutos de descanso, tomó el escenario la banda y coro de Alcolea de Calatrava, compuesta por setenta y tres músicos, -de ambos sexos-, y veinticinco voces corales, -con una media de veinte años de edad-, fundada en mediados de los pasados años cincuenta, y que ha actuado, además de en nuestra provincia y en numerosos puntos de la región, o comunidad autónoma, en las andaluzas tierras de Córdoba.
En esta ocasión nos ofrecieron temas cómo “Reina de la O”, de Antonio David Rodríguez; “Triana de Esperanza”, de Claudio Gómez Calado; “Danos tu paz”, de José Luis Perez Zambrana, o “Y te bajaron los ángeles”, de Miguel Sácnhez, al ritmo de la batuta de su director, Martín R. Gijón Pizarro.
A la vista de las ovaciones propiciadas por el respetable, no cabe la menor duda de que el mismo disfrutó de la velada, además de colaborar para el logro de un buen fin.