El aparatoso incendio en un edificio de la calle Ciruela de Ciudad Real, que han presenciado impotentes este viernes decenas de transeúntes que apuraban sus compras de Reyes en el centro de la capital, se ha saldado con tres personas intoxicadas por humo y evacuadas al hospital, una de ellas la dueña del piso en el que comenzó el fuego sobre las 14.00 horas, por causas que se investigan.
Intentó apagar las llamas
La mujer, de 59 años, no tiene nada serio (esta tarde iba recibir el alta) pero ha tenido que ser atendida por inhalación de humo y una quemadura leve en la nariz, al intentar apagar las llamas. Otros dos hombres de 58 y 24 años también fueron examinados en el Hospital General poco después intoxicados por el humo, según han confirmado fuentes del Sescam y el 112.
Los dos varones se quedaron atrapados en el cuarto piso del bloque, hasta el que se propagaron las llamas y la humareda desde el segundo, donde comenzó el fuego con la propietaria dentro. En su caso fue necesaria la ayuda de los bomberos para que salieran por su propio pie poco antes de las tres de la tarde, con la situación más controlada.
Nervios y caos inicial en el vecindario
Manuel Martín Portugués, el sargento de bomberos de Ciudad Real al cargo de las labores de extinción que han durado una hora y media, reconoce que hubo momentos de nervios y caos al principio, “el 112 nos decía que había gente en el ascensor, luego que en las buhardillas, al final se ha desalojado a las personas que había en el edificio en relativamente poco tiempo”.
Lo sensato es refugiarse en casa
“Lo sensato en estas situaciones es protegerte en tu propio piso, y que no pase humo a tu vivienda. La actuación de los bomberos es inmediata, no merece la pena bajar por una escalera, ahí sí se puede uno complicar la vida”, aconseja el profesional al cargo de las dos dotaciones del parque de Ciudad Real que han desplazado al fuego.
El incendio, “escandaloso” a simple vista, se ha controlado en relativamente poco tiempo: “Ante una situación así siempre movilizados a todo el personal del parque de guardia, en este caso ocho bomberos”.
Portugués también celebra el rescate de un gato con vida que estaba buscando su dueña, una vecina del tercero.
Un piso carbonizado y daños en la fachada
El balance material es mucho peor. El piso del incendio ha quedado siniestro total, “carbonizado”, apostilla Martín Portugués, mientras que los laterales, en especial el tercero y el cuarto, han sufrido importantes daños por humo visibles desde el exterior.
Con el susto en el cuerpo y las lágrimas aflorando muchos vecinos que salieron corriendo de sus casas al darse la voz de alarma han vuelto al bloque, en el número 8 de la calle, sobre las cuatro menos cuarto de la tarde. Un poco después se han ido los bomberos tras ventilar y refrescar la zona.
Ahora serán los peritos quienes determinen por qué ha pasado.
