El incipiente movimiento antitaurino de Ciudad Real ha exhibido fuerza con una sonora protesta a la salida de la corrida de este domingo de la feria taurina 2019 que han protagonizado los toreros Aníbal Ruiz, Sebastián Castella y Daniel Luque.
Bajo el lema ‘Queremos toros, vivos y libres’ y “Queremos cultura sin tortura” colectivos animalistas movilizados por la Asociación Cultural Antitaurina de Ciudad Real han marchado en manifestación hasta las inmediaciones de la plaza de toros en la que han denunciado la tortura y el sacrificio de animales en estos festejos.
“Pedimos respeto, empatía, paz, corazón, evolución”, han leído en un manifiesto en el que han exigido al nuevo equipo de gobierno de Ciudad Real, una coalición de PSOE y Ciudadanos, que sigan sin subvencionar unos festejos que califican de “anacrónicos”. También han reivindicado que no se derrame sangre animal con el dinero de todos.
Además han reclamado que se ponga coto de muerte en los pliegos de la plaza, “este año se van a matar seis animales más que todos los años”.
Lee el manifiesto íntegro de la Asociación Cultural Antitaurina de Ciudad Real
La remodelación de la placeta de la plaza de toros, con más espacio, y el lugar permitido para la concentración (un lateral alejado de la puerta de salida de la plaza) ha mantenido alejados a antitaurinos y aficionados, que apenas se han cruzado reproches directamente, como sí pasó el año pasado.
La Policía Nacional ha vuelto a movilizar a un grupo de agentes de la Unidad de Intervención y Reacción (UPR) que se han encargado de apoyar a la Policía Municipal, desplegada a la salida de la plaza. Los pocos intentos de encare entre taurinos y antitaurinos los han cortado de raíz los agentes.
“Ahí está la vergüenza nacional”
Los manifestantes, muchos de protectoras de animales de la provincia y colectivos antitaurinos de Toledo y Guadalajara, han echado mano de sus clásicas consignas: “Esta plaza la vamos a cerrar”, “taurino cómprate un libro”, “yo no me divierto con el sufrimiento” , “vergüenza” o señalando el coso con el dedo: “Ahí está la vergüenza nacional”.
Por lo bajo muchos taurinos replicaban, “¡pues bien que comeis chorizo!”, “vergüenza vosotros” o “si tuvieran que trabajar no estarían aquí”, y se han quejado de que se les permita manifestarse a la salida de la corrida, como el año pasado (en 2017, la primera vez, lo hicieron antes de una de las corridas).
La Asociación Cultural Antitaurina ha rematado su protesta ante la plaza de toros de Ciudad Real con la performance ‘Ave Cesar morituri te salutant”, con seis manifestantes con caretas de toro y una pancarta con los nombres de los seis toros lidiados esta tarde en la plaza de Ciudad Real.
La tauromaquia en la provincia en cifras
El año pasado más de 650 animales fueron “utilizados, maltratados y sacrificados en Ciudad Real bajo la bandera de la tauromaquia, la mayoría de ellos, vacas y becerros”, aporta la Asociación Cultural Antitaurina de Ciudad Real.
Según dicen 67 municipios de Ciudad Real celebraron algún festejo en el que, recalcan “se maltrató animales”, en total estiman que hubo 164 festejos para un público, según el manifiesto, muy escaso. Estos son los datos de afluencia a los toros que dan los antitaurinos de las ferias más importantes: “Almagro, un octavo de plaza; Puertollano, un cuarto; Manzanares, un tercio, Almodóvar del Campo, un tercio y rejoneo en nuestra capital, un cuarto”.
No a la educación en el maltrato animal
Los manifestantes han criticado con dureza “que en las puertas de los colegios de Daimiel se regalaran 1.200 entradas y que este año en nuestra plaza de toros se llene de trampantojos en los que se regalan 3.000 entradas a niños y niñas, apostando por una educación en el maltrato animal”.
Pasadas las diez de la noche, el concierto de pop flamenco organizado por el Ayuntamiento durante los cuatro días de toros ha recuperado el protagonismo del espacio.
Los antitaurinos volverán el año que viene “vamos a estar en todos los festejos importantes hasta que logremos nuestro objetivo: acabar con los toros”, recalca Luis Zamarreño, secretario de la Asociación Antitaurina de Ciudad Real.