La Policía de Ciudad Real auxilió anoche al conductor de un coche que sufrió un accidente en el carreterín del parque forestal de La Atalaya por el atropello de un jabalí (el animal aboyó el coche pero no murió, se perdió en el monte tras el impacto). Ha ocurrido de madrugada y el vehículo ha sufrido daños materiales, según información de la Policía Municipal en sus redes sociales.
La madrugada deja otro accidente de tráfico en la calle Sabinas: un conductor bebido chocó contra los contenedores de basura de la zona. En la prueba de alcoholemia dio 0,95 mg/l (supera la tasa delictiva) por lo que irá a juicio rápido por delito contra la seguridad vial. La intervención es de las 4.45 horas de la madrugada.
Además se han tramitado denuncias por infracción al Reglamento General de Circulación en los controles de alcohol y drogas
Atropellar jabalís, un accidente común en carreteras rurales
El atropello de jabalís es algo común en carreteras de zonas rurales o cercanas a cotos de caza. Estos animales salvajes pueden llegar a ser muy grandes y comúnmente causan accidentes graves con destrozos importantes en los vehículos, causados no solo por el arrollamiento del jabalí sino por los volantazos, invasiones del otro carril y colisiones que pueden ocurrir a raíz de ello, informa en su web la Sociedad para la Conservación de la Naturaleza y del Animal (NACS)
Asimismo, a la hora de buscar responsables del siniestro en muchas ocasiones se convierte en una situación peliaguda.
Pasos a seguir si atropello a un jabalí
Lo primero que deberá hacer si atropella a un jabalí -o más de uno, porque es común verlos en manada- será tratar de mantener la calma y avisar a las autoridades de tráfico de su comunidad autónoma. De este modo, la Policía podrá dar fe del siniestro y del animal causante del accidente.
Deberá ponerse el chaleco reflectante antes de bajar del vehículo y colocar los triángulos de señalización para advertir a otros conductores que se encuentra parado en la calzada.
En caso de que el jabalí haya muerto o no haya logrado llegar vivo muy lejos, será fundamental no tocarlo ni moverlo para que la autoridad policial pueda especificar en el atestado cómo se ha producido el atropello y de dónde procedía el animal. Del mismo modo, es recomendable tomar fotos -con el teléfono móvil por ejemplo- para que haya pruebas gráficas de lo ocurrido.
A la hora de retirar el cuerpo del animal de la calzada, las mismas autoridades de tráfico serán las encargadas de hacerlo o, si sigue herido pero vivo, los agentes forestales se deberán ocupar de llevarlo a un centro de recuperación de fauna salvaje.
En cuanto a quién será el responsable y deberá hacerse cargo de los daños causados por el jabalí, en España es necesario remitirse a la disposición “Responsabilidad en accidentes de tráfico por atropellos de especies cinegéticas” de la Ley 17/2005, de 19 de julio.