Una vecina de Ciudad Real ha denunciado públicamente la situación que se produce en un edificio de la céntrica plaza de Cervantes –que linda con el solar de otro inmueble que fue derruido hace unos años– donde el mal estado de las redes ‘antipalomas’ que se instalaron para que no entraran aves a los balcones del inmueble, está provocando que las palomas y otras aves queden atrapadas entre ellas y finalmente mueran.
Según explica esta vecina, la red se colocó para que no entraran las aves en los balcones y en la azotea, sin embargo, el mal estado de ésta hace que queden atrapadas. Muchas palomas “han entrado por diversos huecos de la red y no saben salir, ya que es muy vieja y está colgando, no tensa, creando bolsas donde se acumulan numerosos cuerpos de aves”.
Además del “sufrimiento”, según la vecina, “se da la circustancia de que el solar está pegado a bares de tapas y los que salen a las terrazas a consumir están a pocos metros de decenas de cadáveres en descomposición de distintas aves”.
Por otro lado, también señala que este sistema ‘antipájaros’, al igual que atrapa palomas, atrapa a otras especies protegidas como los vencejos o las golondrinas.