Ágata Navalón es una poeta que viene del mundo del ‘slam’, una competición de poesía escénica que surge como un subgénero de ésta. Después de competir dentro de esta modalidad en Valencia durante cinco o seis temporadas, un editor la convenció para plasmar todos esos ‘slam’ en un libro.
Y de ahí nació ‘Fragmentos de vikingo’, que reúne 30 poemas y que fue presentado en marzo en ‘Vociferio’, uno de los festivales de oralidad más importantes del país.
La propia Ágata Navalón señala que su poesía es “diferente” al ser más una poesía de “desgarro”. De hecho, explica que ‘Fragmentos de vikingo’ es una “reflexión del mundo actual para saber hacia dónde vamos y hacia dónde nos llevan las nuevas tecnologías”, siendo a su vez los poemas recopilados en el libro “un canto a la independencia, a la libertad y a sobrevivir a pesar del ruido que nos rodea”.
Añade que ‘Fragmentos de vikingo’, que está dividido en tres partes, “es un viaje donde los protagonistas intentan encontrar un sitio dentro de este mundo. También se puede encontrar mucho paisaje manchego, pues yo trabajo en la provincia de Ciudad Real, por lo que mi obra también es una mezcla de los vikingos que viajan y recorren territorios”.
Confiesa que realmente se trata de un trabajo social: “Tengo mucha obsesión por el lenguaje, a pesar de que vengo del mundo del ‘slam’ (también conocido como Poetry Slam). Por ello es un libro complejo y difícil de leer, siendo muy metafórico y elaborado. De hecho, hay mucha artesanía en el libro”.
‘Fragmentos de vikingo’ también “utiliza la metáfora a través de los mitos vikingos”, y reúne elementos de valores sociales recogidos del momento actual.
A pesar del complicado momento que vive la sociedad, la poesía, por el contrario, está empezando a vivir un momento álgido: “Los poetas usamos la poesía para hablar de lo que nadie hablaba al principio. Por ello, cuando empecé dentro del mundo del ‘slam’, siendo la única mujer ‘slamer’ en Valencia y en Barcelona, al menos que tenga conocimiento, era una vía de hablar de lo que estaba pasando. Por ello considero que el ‘slam’ fue una vía, dentro de la periferia, para sacar toda la ira que llevábamos dentro”.
Ágata Navalón, que no es su nombre real sino el literario, pues era con el que participaba en los ‘slam’ de Valencia, es licenciada en filología Anglogermánica por la Universidad de Valencia. Su trayectoria profesional ha estado ligada a la formación en el Centro de Lenguas de la Universidad Politécnica de Valencia y en la Universidad de Castilla-La Mancha, así como en los centros de Educación Secundaria.
Una vez presentada a la poeta y a su obra, se ha procedido a leer algunos de los poemas recopilados dentro del libro ‘Fragmentos de vikingo’, presentado en el espacio ZZ Books (calle Paz, 1) de la capital manchega, regentado por Mario Figueroa. Se trata de una librería y un pequeño taller de diseño donde se realizan charlas, encuentros y se presentan libros para fomentar la cultura.
Desde ZZ Books procuran que los libros que disponen estén en consonancia con lo que se hace en la trastienda, cuidando mucho el formato y el contenido, ofreciendo libros de pequeñas editoriales e independientes.
