La festividad de Todos los Santos este año ha dejado un fin de semana de tres días que, sin lugar a dudas, será aprovechado por muchos para hacer alguna escapada.
El alojamiento rural se presenta como una de las opciones estrella para pasar estos días de descanso con familia o con amigos, tal y como ponen de manifiesto los datos de ocupación del portal Escapada Rural para este puente en España, con un 60% de estimación.
En este mapa, Castilla-La Mancha se postula como una de las regiones líderes en reservas, al igual que la provincia de Ciudad Real tiene una importante oferta de este tipo de alojamientos. En concreto, el territorio ciudarrealeño cuenta con 168 establecimientos rurales abiertos, según los datos del mes de septiembre recogidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Se trata de un cifra voluminosa, aunque esté por debajo de los 212 alojamientos de septiembre de 2023, que capta la atención de viajeros y turistas, como es el caso del puente que comienza este viernes.
«Si no hay cancelaciones tenemos todos los fines de semana reservados»
Así lo dicen algunos responsables de casas rurales consultadas por Lanza, como Casa de Pacas, situada en Bolaños de Calatrava. Este alojamiento, comentan, tiene gran aceptación en estas fechas, y noviembre será mejor que el año pasado. «De momento, si no hay cancelaciones, tenemos todos los fines de semana reservados», indican.
En La Espartera, situada en El Robledo, una localidad que cuenta con bastantes establecimientos de este tipo, también han puesto el cartel de ‘all sold’ este fin de semana, coincidiendo con el Puente de Todos los Santos, señala Antonia Sanz.
Explica que este verano ha estado «flojo», aunque en el otoño ha cambiado la tendencia y ya se ocupó el fin de semana del 12 de octubre, así como ya lo tienen alquilado para el puente de la Constitución y Noche Vieja. Noche Buena está más flojo, aún sin ocupar, como el resto de fines de semana, posiblemente porque «a la gente le da más pereza», añade.
Descenso en la demanda
Un testimonio que corroboran los datos de los últimos meses en los que se ha producido un descenso en la demanda de estos alojamientos de la provincia.
Concretamente durante los siete primeros meses del año, Ciudad Real ha visto decrecer el número de pernoctaciones, al contabilizar 46.633, por las 54.353 registradas entre enero y julio de 2023, lo que supone una caída de 7.720 noches. Si nos vamos al último mes registrado, que es el de septiembre, las pernoctaciones superaron las 5.300, mientras que en el mismo mes del 2023, según el INE, alcanzaron las 7.800. Aún quedan un par de meses a este 2024 para poder recuperar con fechas claves que pueden hacer aunque no superar, sí intentar igualar los resultados del año pasado.