El Árbol de los Donantes impulsado por la Asociación para la lucha contra las enfermedades de riñón (Alcer Ciudad Real), sigue floreciendo con fuerza un año después de su inauguración. 18 trasplantados en la provincia de Ciudad Real en el último año han colgado en las ramas sus hojas con sus mensajes de agradecimiento a los donantes que les han regalado vida.
Estas hojas verdes y amarillas son el pequeño homenaje que desde Alcer se quiere hacer a esas grandes personas que han donado sus órganos, un homenaje a héroes silenciosos que han permitido que otros puedan seguir creciendo y floreciendo. Como subrayó el presidente de Alcer, Pablo León, “dejan un legado de vida y honor”.
“Estas hojas harán que su generosidad perdure en el tiempo”, apuntó León, que indicó que los trasplantados tienen que ser conscientes de que llevan un pedacito de un héroe.
“Este árbol también es símbolo de esperanza para el futuro”, concluyó León.
En representación de los trasplantados, habló Emilio, quien expresó el más sincero de los agradecimientos a aquellos que les han regalado vida, tiempo. “La mejor manera que tenemos para devolvérselo es dar esperanza y tesón”, apuntó Emilio, que agradeció la labor que desarrolla la Organización Nacional de Trasplantes, los profesionales del sistema de salud, así como Alcer, ayudando en este tortuoso camino.
En representación de las instituciones hablaron el portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento, Guillermo Arroyo, el vicepresidente de la Diputación Adrián Fernández; y el delegado provincial de Sanidad, Francisco José García. Todos subrayaron la importancia de concienciar sobre la donación y apoyar a asociaciones como Alcer.
