El expresidente del Gobierno de Castilla-La Mancha y profesor de Historia Contemporánea en la UCLM, José María Barreda, ha reabierto el ciclo de conferencias ‘Via Civitas’, organizado por Ayuntamiento de Ciudad Real y el Instituto de Estudios Manchegos, que cada martes se celebra en el Antiguo Casino de Ciudad Real y que se tuvo que paralizar debido a las restricciones sanitarias que se aplicaron a la capital provincial antes de las fechas navideñas para frenar la expansión del COVID-19.
Barreda, ante un Salón de Actos del Antiguo Casino con medio centenar de personas, ha hecho un recorrido por el Ciudad Real del largo siglo XIX, un siglo que para el ponente comenzó en 1808, con el inicio de la Guerra de la Independencia, y finalizó en 1923, con el golpe de estado del capitán general de Cataluña, Miguel Primo de Rivera.
Momentos antes del comienzo de la conferencia, José María Barreda ha indicado a Lanza que el siglo XIX fue un siglo muy determinante para la historia de España, pues fue un siglo en el que la población pasó de ser súbdita a ciudadana y en el que comenzaron a fraguarse las libertades en nuestro país al redactarse la primera constitución.
Es un siglo muy determinante para la historia determinante, es cuando se fraguó la historia española, se pasa de súbditos a ciudadanos y se pasa a libertad civil y constitución. Es un siglo en el que se construye el estado español. Se consruyo las procvincias y fue un factor fundamental CR ser capital. Floreció con toda su potencialidad a finales del siglo XX.
Barreda ha añadido que también fue un siglo muy importante para Ciudad Real, pues fue el siglo en el que se estableció, oficialmente, las divisiones provinciales, haciendo destacar a Ciudad Real como capital de la provincia, que hasta la fecha «apenas se diferenciaba de los otros grandes pueblos de La Mancha», como podía ser Alcázar de San Juan o Valdepeñas. «La capitalidad fue lo que le otorgó la diferencia, aunque durante mucho tiempo fue tildada de ‘capitaleja’ debido a que tardó en despegar», ha comentado.

También ha narrado momentos interesantes de la época que se vivieron en la capital de la provincia, como la llegada del ferrocarril; la desecación de los charcos de Las Terreras, «que eran un importante foco de insalubridad en la ciudad»; la creación de nuevos espacios de sociabilidad como los cafés y los casinos en la capital, así como el funcionamiento del sistema caciquil de la Restauración, «algo que se debía al analfabetismo de la época, cuya tasa superaba el 70%».
El expolítico y profesor también ha reparado en los episodios de cólera que se vivieron en Ciudad Real y la pandemia de la gripe del 1918. Enfermedades para las que se aplicaron medidas muy parecidas a las que se aplican hoy para evitar los contagios del COVID-19. En aquella época ya comenzaron a realizar confinamientos y a restringirse la movilidad entre poblaciones.
Próximas conferencias
Las cinco restantes conferencias serán responsabilidad de los profesores Francisco Alía (16 de marzo, ‘Ciudad Real en la primera mitad del siglo XX’), Diego Peris (23 de marzo, ‘Ciudad Real siglo XX. La ciudad reconstruida’), Luis Rafael Villegas (30 de marzo, ‘Ciudad Real en la Edad Media: del nacimiento y de su vida económica’), Jerónimo López-Salazar (6 de abril, ‘Ciudad Real en la Edad Moderna’), y concluyendo el presidente del Instituto de Estudios Manchegos, Alfonso Caballero Klink, el 13 de abril con la intervención sobre ‘Fuentes históricas para el estudio de Ciudad Real’.