Durante el pasado año, Cáritas Diocesana de Ciudad Real estuvo presente en cada localidad, en cada barrio y en cada rincón de su diócesis, acompañando a más de 7.800 personas, poniendo de manifiesto “nuestro compromiso en la defensa de la dignidad humana de todas las personas y haciendo visible la realidad que éstas viven”.
Así lo ha dado a conocer este jueves la secretaria general de Cáritas Diocesana de Ciudad Real, Dolores Olmedo López, quien ha presentado los datos de la Memoria de Cáritas Diocesana durante 2024, señalando que “lamentablemente, seguimos observando una tendencia al alza que reafirma, que las situaciones de pobreza y exclusión, se siguen perpetuando a nuestro alrededor”.
En este sentido ha explicado que, de las 7.800 personas acompañadas durante el pasado año, “fueron atendidas por primera vez en Cáritas 1.555, lo que constata que la posibilidad de vivir en una situación de vulnerabilidad o exclusión social es fácil hoy en día, así como que las situaciones de pobreza se cronifican y mantienen en el tiempo”.
Pese a ello, ha aclarado que la suma de las personas atendidas “supera las 7.800 citadas ya que, si bien la puerta de entrada es la acogida, luego son derivados a distintos programas”.
PROGRAMA DE ACOGIDA Y ACOMPAÑAMIENTO
Refiriéndose al Programa de Acogida y Acompañamiento, puerta de entrada a Cáritas, Olmedo ha señalado que “fueron atendidas 4.625 personas, prestando más de 17.500 ayudas para cobertura de necesidades básicas como alimentación e higiene, pago del alquiler, pago de suministros del hogar y gastos sanitarios entre otros”.
Asimismo, fruto de los procesos de acompañamiento que se inician en la acogida, desde el Programa de Familia de Cáritas “se realizaron diversas acciones educativas para el desarrollo y la promoción de las personas más vulnerables, haciendo seguimiento familiar a 1.661 personas, de las que 542 participaron en 39 talleres educativos realizados por toda la diócesis, trabajando competencias sociales, competencias digitales, alfabetización y Competencias Clave, organización doméstica y economía del hogar, además de promover espacios de participación social donde las personas han podido compartir sus vivencias, mejorando y ampliando sus relaciones sociales”.
También, durante el pasado año 2024, Cáritas estuvo muy de cerca de las personas mayores, especialmente de los que viven en zonas rurales de la provincia de Ciudad Real, “siendo un total de 532 personas de edad avanzada, las que han sido visitadas por los voluntarios de Cáritas”.
Dentro del Área de Inclusión Social, conviene resaltar el trabajo realizado con las personas migrantes, las mujeres en contexto de prostitución, las personas sin hogar y las personas con adicciones.
De este modo, el Programa de Migraciones que inicia su trabajo desde la atención que realizan las Cáritas Parroquiales, centró su atención en cuatro líneas de trabajo, como son el asesoramiento personal y jurídico, haciendo una orientación en clave de derechos; la formación en competencias socio-lingüísticas a través de clases de castellano y sesiones grupales sobre acceso a derechos y recursos; el trabajo y sensibilización con el voluntariado de Cáritas para un mejor desempeño de las acciones que se han llevado a cabo; y los procesos de evaluación y participación con las personas migrantes.
De otro lado, durante el año 2024 Cáritas atendió a 3.536 personas migrantes, además de 1.002 personas temporeras.
Respecto al cuanto al Programa de Mujer, desde Cáritas siguen acompañando y mejorando el bienestar de mujeres en contexto de prostitución, llegando a atender en el año 2024 a 56 mujeres, las cuales pudieron encontrar en la acogida de Cáritas un espacio seguro y de confianza. De las 56 mujeres acompañadas, se detectaron 16 casos con indicios de explotación sexual y 15 con indicios de trata.
Por su parte, desde el Programa de Atención a Personas sin Hogar, Cáritas dio respuesta a 578 personas que vivían en la calle o sin un hogar digno y sin cobertura sanitaria, social o legal. Este trabajo se llevó a cabo en los dos Centros de Urgencia: Jericó en Ciudad Real y Samaría en Alcázar de San Juan, en el Centro Residencial Casa de Abraham en Daimiel, para las personas que iniciaron procesos de recuperación e inclusión para dejar la calle y en un piso de autonomía situado en Ciudad Real.

PROGRAMA DE ADICIONES
Conviene recordar que el Programa de Adicciones, dirigido a la reducción de daños e inicio de tratamientos de personas con adicciones, consta de dos unidades de intervención: una parte de trabajo ambulatorio en el “Centro de Acogida y Encuentro Siloé”, de Ciudad Real y otra parte, que se desarrolla en la Unidad Residencial situada en Miguelturra.
Durante el año 2024, fueron atendidas 373 personas desde estos dos centros, destacando también el acompañamiento que se viene realizando desde Siloé, en los centros penitenciarios de Herrera de la Mancha y de Alcázar de San Juan, así como en el CIS Concepción Arenal, con 403 personas atendidas.
De su lado, en el Programa de Empleo y Economía Social, Cáritas Diocesana de Ciudad Real, acompañó a 648 personas durante el 2024.
Dolores Olmedo López ha añadido que el trabajo de Cáritas “no se queda nunca en el límite de la diócesis”, debido a que “la universalidad de la Iglesia nos interpela y nos llama a levantar nuestros ojos, nuestro corazón, nuestro pensamiento, a tantos hermanos nuestros que sufren las consecuencias de las injusticias en otros lugares del mundo”.
Así, “se desarrollaron 13 proyectos de cooperación con presencia en 8 países como Bolivia, Perú, Ecuador, Haití, Burkina Faso, Camerún, Congo Brazaville y Palestina.
Además, Cáritas también dio respuesta en 2024 a las distintas Campañas de Emergencia activadas desde Cáritas Española para dar respuesta humanitaria en Haití y en Tierra Santa.
Destacable fue también el apoyo a la emergencia ocasionada por la DANA en las provincias de Valencia y Albacete, pudiendo canalizar todas las donaciones recibidas para dicho fin, que ascendieron en 2024 hasta los 642.490€, si bien si se añaden los meses de este año, la cifra asciende hasta los 773.573€.
ACTIVAS 85 CÁRITAS PARROQUIALES Y 10 CÁRITAS INTERPARROQUIALES
En la actualidad, Cáritas Diocesana de Ciudad Real, mantiene activas 85 Cáritas Parroquiales y 10 Cáritas Interparroquiales, trabajo que se sustenta con el apoyo de 1.081 voluntarios y 63 personas contratadas. Un trabajo y una misión que ha contado con un presupuesto superior a los 4.870.000 €, contando con un 34,4% de fondos públicos, un 55,3% de fondos propios (en los que se incluyen las colectas y las aportaciones de socios y donantes) y un 10,3% de empresas o entidades privadas.
«LA MEMORIA DE CÁRITAS ES EL REFLEJO DEL COMPROMISO, SOLIDARIDAD Y LA ESPERANZA QUE COMPARTIMOS CON MILES DE PERSONAS»
Por su parte, Concepción Aranguren Vila, directora de Cáritas Diocesana de Ciudad Real, ha señalado que la memoria de Cáritas que han presentado hoy “no es solo un documento”, sino que “es el reflejo del compromiso, la solidaridad y la esperanza que, día a día, compartimos con miles de personas en situación de vulnerabilidad en nuestra diócesis”.
En este sentido ha apuntado que con este estudio “queremos rendir cuentas con transparencia, pero también dar voz a quienes muchas veces no la tienen”, indicando que “cada cifra, cada proyecto y cada testimonio habla de una realidad que nos interpela y nos compromete.
Aranguren ha recordado que la Iglesia, a través de Cáritas, “ofrece apoyo a familias en situación de pobreza, a personas sin hogar, con adicciones, migrantes, mayores en soledad, mujeres en contextos de prostitución y personas con adicciones. El enfoque no es solo asistencial, sino transformador: busca que cada persona sea protagonista de su propio proceso de inclusión”.
Asimismo, ha puesto en valor que las Cáritas parroquiales “son la puerta de entrada para promover y realizar estas acciones ya que son el corazón del trabajo social de Cáritas en el territorio, y constituyen la primera línea de escucha, acompañamiento y atención a las personas que se acercan en busca de ayuda, además de que su labor no se limita a ofrecer una respuesta inmediata y puntual, sino que abre la puerta a un proceso de acompañamiento”.
También ha destacado que en los estos espacios de acogida que realizan las Cáritas parroquiales, el trato humano y la escucha activa “son fundamentales”. Señalando que “cada persona es recibida con respeto, sin juicios y se les ofrece un espacio donde puedan expresar su situación, sus miedos y sus esperanzas”.
En esta línea ha destacado que Cáritas “acoge a quienes han perdido el rumbo, a quienes sufren pobreza, exclusión o abandono y defiende la dignidad de cada persona, promoviendo la justicia social y denunciando las desigualdades. Por todas estas acciones, Cáritas tiene un gran impacto en la sociedad no solo a nivel social sino también a nivel económico y humanitario”. Por todo ello, ha apuntado que Cáritas Diocesana de Ciudad Real “es un motor de cambio social que, desde la fe y el compromiso, construye cada día una sociedad más humana”.
«ESTA MEMORIA NOS HACE DESCUBRIR LA IMPORTANCIA DE TODOS ESTOS PROYECTOS QUE CÁRITAS LLEVA ADELANTE»
Por su parte, el obispo de Ciudad Real, Gerardo Melgar, ha indicado que «Cáritas acompaña como peregrina y como sembradora de esperanza a quienes luchan por lograr algo positivo que necesitan en su vida, como personas por mantener su dignidad o por erradicar o ayudar a superar unas determinadas carencias».
Según Melgar, «en la institución de la Iglesia, las personas necesitadas esperan conseguir algo necesario para vivir más dignamente y erradicar alguna carencia que tengan que quitar. Y para ello saben que cuenta con Cáritas, que les ofrece acogida de sus personas tal como son, siempre respetadas en su dignidad y por su situación. A su vez encuentran en Cáritas el acompañamiento para no luchar solos o solas sino acompañadas por quienes les pueden ayudar a recobrar esas esperanza perdida».
También se ha referido a los numerosos proyectos sociales que Cáritas ofrece a las personas que lo necesitan y que «por circunstancias de la vida, han perdido la esperanza».
Desde su punto de vista, la Memoria de Cáritas «nos hace descubrir a todos la importancia de todos los proyectos que Cáritas lleva adelante».