La empatía ciudadana con José Manuel Lomas, el librero jubilado de Ciudad Real que mató de dos disparos de escopeta a un intruso que se coló, supuestamente a robar, en la finca en la que vive en el parque forestal La Atalaya, ha saltado a la plataforma Change.org, en la que han proliferado las peticiones de indulto para el octogenario, desde que el sábado se conoció el veredicto del jurado popular: culpable de homicidio con atenuantes.
La petición que lleva más de 3.000 firmas la inició el domingo el abogado gallego Xaime da Pena Gutiérrez, que ejerció este invierno de portavoz de la plataforma 6-F de agricultores y ganaderos. Y hay alguna más en la que los peticionarios andan despistados, hablan de “libertad” para Lomas (el octogenario pasó nueve meses en prisión, pero está libre desde 2022) y de una condena de cárcel que no se ha producido todavía.
En este caso no hubo legítima defensa, según el jurado
José Manuel Lomas, juzgado por un jurado popular la semana pasada en la Audiencia Provincial de Ciudad Real, ha sido declarado culpable de un delito de homicidio, con la eximente incompleta de trastorno psíquico y la atenuante de confesión. El jurado entendió que en su caso no cabe la legítima defensa, tal y como recoge el Código Penal.
El hombre al que disparó no iba armado, entró en su propiedad pero no en su vivienda, y estaba agachado en la oscuridad cuando Lomas, obsesionado por seguridad y con armas cargadas en su habitación, salió al patio de su finca y al ver que podía haber entrado alguien disparó dos tiros con los que mató casi en el acto al intruso, un joven de 35 años, con antecedentes policiales por robo. Después llamó a la Policía Nacional y contó lo que había hecho, aunque insistió en el juicio que creyó disparar «a un bulto».
Lomas está en libertad condicional desde mayo de 2022
Lomas, que sigue viviendo en su finca y acude con regularidad a firmar a los juzgados, está a la espera de que la magistrada que presidió el juicio dicte la sentencia. La pena de prisión no superará los siete años y medio, puede que se quede en seis (un homicidio se pena con entre diez y quince años de prisión), mientras que la indemnización la establecerá la magistrada, en los términos habituales cuando alguien mata a otra persona.
Esta semana se ha sabido que a familia del fallecido, Nelson Ramírez, no se opone a la petición de indulto ni a que suspenda en ejecución de sentencia su ingreso en prisión. El abogado defensor de Lomas, Juan Manuel Lumbreras Ruiz, se ha enterado por la prensa de la petición de indulto en Change.org.
La madrugada de la Pandorga de 2021
José Manuel Lomas, de 80 años ahora, propietario de la histórica librería Aspas de la plaza Mayor de Ciudad Real, ya desaparecida, vivía y vive solo en la finca Valdelobos de La Atalaya desde su jubilación. Una casa de campo aislada dentro de una zona de la capital en la que hay más viviendas.
La noche de la Pandorga de 2021, sobre las dos de la madrugada, se despertó para ir a regar, se tomó su desayuno ligero y salió al patio de su finca, sin encender ninguna luz. Notó que alguien había entrado en su propiedad y, alarmado, entró de nuevo en la casa, cogió la escopeta cargada con la que dormía (también tenía un rifle a mano), hizo una ronda por el patio y sin mediar palabra -al menos es lo que dice- disparó dos veces “a un bulto”, que tenía su motosierra, que resultó ser el acusado Nelson Ramírez.