El movimiento ciudadano Ciudad Real contra el Racismo (CR2), constituido el mes pasado para luchar contra la xenofobia y por la integración, condena “cualquier agresión sexual, independientemente del origen o nacionalidad del agresor”, en un comunicado, en el que aluden sin citarla a la denuncia de una menor víctima de una presunta agresión sexual a mediados de abril a manos de dos hombres.
“Queremos recalcar también que destacar el lugar de procedencia de los agresores quita el foco del delito, que es lo verdaderamente preocupante”, aseguran.
El colectivo replica así a Vox, que el viernes pasado relacionó esta presunta agresión sexual denunciada en Ciudad Real con la inmigración ilegal y pidió a CR2 que se pronunciara condenando lo ocurrido.
Contra la normalización del odio
CR2, que se constituyó a primeros de abril en la Casa de la Ciudad, aseguran que han surgido como movimiento porque consideran que Ciudad Real no queda al margen de esta corriente y de estas prácticas y contra la normalización de los mensajes de odio. “En nuestra ciudad y provincia se normalizan cada vez más los mensajes de odio y se dan múltiples situaciones cotidianas de discriminación racial en el acceso a la vivienda, salud, controles policiales, el ámbito laboral, educativo o en el espacio público”.