Las consejerías de Igualdad y Bienestar Social de Castilla-La Mancha han rubricado su compromiso con la defensa y la promoción de los derechos LGTBI a nivel internacional con la firma de la Declaración de Mérida en coordinación con Fundación Triángulo en la semana del Orgullo.
“La Ley de Diversidad Sexual y Derechos LGTBI no se ha aprobado para dejarla en cajón”, ha dicho este jueves la consejera de Igualdad y portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, durante la firma en Ciudad Real, que supone un primer paso en la incorporación de la perspectiva de género y LGTBI en los proyectos de cooperación al desarrollo en los que participe la Junta.
Desde 2013, ha indicado Fernández, “en España han aumentado un 45 por ciento los delitos de odio”. El año pasado se registraron 477 y la segunda motivación fue la orientación o la identidad sexual. Los expertos calculan que “apenas se denuncia el 10 por ciento”, por lo que “esto supondría que desde 2013 ha habido 20.000 delitos de odio y 25 por ciento han sido hacia lesbianas, gays, trans, bisexuales e intersexuales.
Ante estos datos, la consejera ha destacado que “es una obligación luchar contra el odio” en todos los ámbitos de la vida, en España y fuera de ella, pues en la actualidad 76 países del mundo, “aproximadamente un 40 por ciento”, contemplan penas “contra el amor libre”, contra las relaciones sexuales y la transexualidad, algunos de ellos con pena de muerte. Entre ellos está Arabia Saudí, Catar o Pakistán.
Con esta declaración, ha insistido Blanca Fernández, Castilla-La Mancha abandera “el respeto a la diversidad y a la libertad” y se compromete a defenderlo a nivel global. “Vivimos en un mundo globalizado, pero sobre todo afecta a la economía; ya es hora que también se globalicen los derechos”, ha expresado.
Un enfoque “transversal”

A través de la Ley LGTBI de Castilla-La Mancha, el Gobierno regional se comprometió al desarrollo de políticas públicas que permitan el “libre desarrollo de la personalidad”, ha recordado la consejera de Bienestar Social, Bárbara García, y eso supone la implicación de todas las áreas de manera “transversal”.
De cara a la elaboración de la Estrategia de Cooperación, García ha descrito que han celebrado talleres grupales en las cinco provincias, han articulado un mecanismo de participación ciudadana para la recepción de propuestas y realizarán entrevistas con actores claves, como es Fundación Triángulo y otros colectivos LGTBI.
En la misma línea, la delegada de la Junta de Comunidades en Ciudad Real, Carmen Teresa Olmedo, ha expresado que la firma de la Declaración de Mérida “nos pone a la vanguardia de la defensa de los derechos y de la condena de aquellos que tienen actitudes homófobas o que reprimen los derechos de las personas LGTBI”.
Las leyes aprobadas en el mundo occidental “no son suficientes”

El presidente de la Fundación Triángulo, José María Núñez, y la representante regional, Maribel Blanco, han acudido a Ciudad Real para la firma de esta declaración a la que ya se han adherido los gobiernos de La Rioja, Baleares y Aragón, además de ayuntamientos como los de Sevilla y Valladolid, y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.
“Castilla-La Mancha hoy le dice al mundo que aprobar la Ley LGTBI es algo necesario y maravilloso, pero que a esta región también le importan los derechos humanos de todo el mundo”, ha dicho José María Núñez, que ha insistido en que “no es suficiente” que Occidente avance en la protección para las personas LGTBI, porque todavía “queda muchísimo camino por recorrer”.