Después de la denuncia interpuesta por el delegado de estudiantes de la Facultad de Letras de la UCLM en el Campus de Ciudad Real por una presunta agresión al ir a reclamar el dinero obtenido en la ‘cervezada’ de dicha facultad y celebrada en el complejo de ocio Playa Park, el Colectivo Estudiantil de Ciudad Real ha pedido al rectorado de la universidad que éstas “se vuelvan a realizar, como se venía haciendo hace unos años, dentro del campus y de manera controlada”.
En un comunicado remitido a los medios de comunicación, el Colectivo Estudiantil señala que esta medida “evitaría estafas a los y las estudiantes y encontronazos”. Además, pide a la universidad que se pongan en marcha alternativas para que “el estudiantado pueda recaudar fondos de una manera más sana y no potenciando el alcoholismo entre la juventud como se ha hecho hasta ahora”.
El Colectivo Estudiantil señala que estas fiestas son organizadas por los alumnos de últimos cursos para “recaudar dinero” y así financiar sus viajes de fin de carrera y graduaciones. “Ante la imposibilidad de realizar dichos eventos en el propio campus, se ven obligados a recurrir a locales privados para su realización”. Los estudiantes contactan con los responsables de dichos locales y pactan las condiciones “de palabra”, “lo que da pie a que en numerosas ocasiones sean engañados (en más de una ocasión los compañeros y compañeras han salido descontentos después de realizar este tipo de eventos en diferentes locales de Ciudad Real) y con la consiguiente imposibilidad de recurrir a la legalidad.”
Desde el Colectivo Estudiantil señalan que la UCLM, “que conoce de sobra esta situación”, no hace nada por evitarla. “Lejos de ceder espacios en el campus, permite que se hagan esta serie de tratos con locales privados, en nombre de las facultades, sin ningún tipo de regulación, y se lava las manos”. Sin embargo, los estudiantes denuncian que la UCLM consiente sucesos como los ocurridos el pasado año en plena época de exámenes finales, “cuando los asistentes a una macrofiesta, organizada por un local privado, ocuparon una zona del campus y organizaron un botellón, molestando a quienes estudiaban en la biblioteca y creando numerosos desperfectos (pintadas, defecaciones, etc.)”, finaliza el comunicado.