La sección primera de la Audiencia Provincial de Ciudad Real ha condenado a tres años y medio de cárcel por tráfico de drogas a Christian F.V.M., de 35 años, juzgado a mediados de enero junto a su pareja A.M.B.C. por trapichear con cocaína en el verano de 2023 en la capital de la provincia.
El tribunal falla que no hay pruebas sólidas para condenar a la mujer y la absuelve, según recoge la sentencia que se notificó el viernes a las partes. Además declara válidas las escuchas telefónicas y todas las actuaciones policiales de esta investigación, impugnadas por los defensas.
La sala considera probado que C.F.V.M., adicto a las drogas (se le aplica la atenuante de drogadicción), trapicheó con cocaína y hachís en su domicilio de la plaza de la Constitución de Ciudad Real, al menos entre el 30 de julio al 11 de agosto de 2023, cuando lo detuvieron tras un registro domiciliario.
46 gramos de cocaína pura, hachís y dinero
El día del registro la policía encontró 34,1 gramos de cocaína con una pureza del 95,26% y otros 12,18 gramos de cocaína, del 95,26% de pureza por otro lado. Además de 2,36 gramos y 28,08 de resina de hachís, dos básculas de precisión, bolsas de plástico monodosis, una libreta con anotaciones, seis teléfonos móviles y 600,10 euros en billetes de distinto valor.
El valor de la droga intervenida “y que iba a ser destinada a su distribución y venta”, dice la sentencia, asciende a 14.103. La sala multa al acusado con 28.206 euros, además de las costas procesales.
No hay pruebas contra su pareja
No se considera probado que su pareja, con la que tenían una relación sentimental compleja, de idas y venidas, conociese el negocio ilícito ni que viviese en ese piso en el que la encontró la policía con la niña de ocho meses de ambos.
El tribunal da por válida la explicación de la mujer que declaró en el juicio que no vivía allí, que estaba en otra casa con su hija, pero que iba con frecuencia para que el padre tuviera contacto con la bebé, aunque no lo dejaba a solas con ella por sus problemas de adicción.
Investigación por intento de homicidio
La investigación de esta trama de tráfico de drogas surgió a raíz de la investigación de un intento de homicidio en otro piso de la calle Alarcos, una especie de ‘narcosala’ que visitaba Christian y otras personas. El 23 de julio de 2023 otro hombre, compañero del acusado en este juicio, se precipitó al vacío desde ese cuarto piso.
La Policía Nacional abrió una investigación y llegó a la conclusión de que no había sido ni una caída accidental ni un intento de suicidio, sino más bien un ajuste de cuentas y empezaron a investigar al principal sospechoso. La intervención de su teléfono les llevó hasta el caso que ha se juzgado y sentenciado ahora.