El vino como centro de la tradición, la historia, el turismo, la economía y la cultura es un gran nicho de oportunidades para el sector hostelero si va vinculado a profesionales formados y solventes.
Es el gran reto alcanzado en el Curso de Sumiller de nivel avanzado desarrollado desde marzo en la Cámara de Comercio en colaboración con instituciones como la Diputación provincial.
Tras tres meses de clases teórico-prácticas impartidas por la consultora Cooking Ideas, los 18 alumnos participantes (la mayoría de la provincia de Ciudad Real) recibieron los diplomas acreditativos que acreditan una cualificación profesional.
Potencial vinícola
El presidente de la Cámara, Mariano León, señaló este lunes en el acto de clausura, que se cerró con una cata comentada, que se trata del curso “más prestigioso e importante de España” en el sector celebrado en el escenario “con el mayor potencial vinícola” como es Ciudad Real.
Valoró que la provincia registre el 25% del vino que se produce en España, una realidad “a la que a veces damos la espalda y no lo vendemos”, por lo que, a juicio, hay que potenciar la cultura del vino para que se sume a la oferta turística de naturaleza y arte de Ciudad Real.
“Sois la avanzadilla” en el sector gastronómico, comentó a los sumilleres, y les pidió “colaboración para divulgar los conocimientos” que han aprendido para que el vino “tenga el protagonismo que se merece en la hostelería”.
Más turismo en la capital
Por su parte, el concejal de Promoción Económica del Ayuntamiento capitalino, José Luis Herrera, agradeció a los alumnos su participación en un plan formativo sobre el consumo de vino y otras bebidas en la mesa, y destacó coincidiendo con el Día Internacional de la Tapa, el aumento del turismo en la capital, con 8.500 visitantes más.
Subrayó que los turistas valoren como segundo servicio más valorado es la gastronomía y la oferta de restauración, por lo que hay que profesionalizar el sector.
También valoró “la suma de sinergias” entre las instituciones, dentro de una acción conjunta en la que “todos trabajamos en la misma dirección, con los mismos objetivos y estrategias”.
Promoción de destino
El delegado provincial de Economía, Empresas y Empleo, Agustín Espinosa, habló de la importancia de la promoción de destino, un ámbito en el que profesionales como los sumilleres del curso “tenéis mucha importancia” a la hora de trabajar “en la calidad de atención al visitante”.
De esta manera “se avanza” y para ello “hace falta formación y experiencia”.
Espinosa reflexionó sobre la figura de un sumiller, “más complejo de lo que parece”, pues “va más allá de ser un catador de vino”, dado que “se trabaja con sensaciones”, cada vez más demandadas por los turistas.
Tarjeta de visita
Por último, Gonzalo Redondo, responsable del Área de Promoción Económica de la Diputación, coincidió en “la apuesta decidida” por la implantación de los cimientos de “una estrategia compartida” entre instituciones públicas y el sector turístico y hostelero.
“Nos la jugamos todos”, concretó, sobre todo en la cultura del vino, donde “hay que compartir el trabajo”, con una labor esencial.
Recordó la apuesta de la Diputación por la Feria Nacional del Vino (Fenavin), que en su novena edición ha batido récords en cifras de importadores y en volumen de negocio.
Por ello, la labor de promoción del vino en todos los ámbitos, en su opinión, ha de transcender fronteras, para alcanzar mayores niveles de comercialización y a mejor precio, así como a nivel interno habría que promover acciones para aumentar el consumo de los jóvenes de manera responsable.
Precisamente, indicó, el vino forma parte de la hostelería y la restauración que son “la tarjeta de visita” de una provincia con una oferta de naturaleza importante, con dos parques nacionales y un valioso patrimonio.
Potenciador del turismo
En definitiva, todo estos portavoces pusieron en valor el papel de un sumiller al frente de “una buena carta de vinos” en un restaurante como “elemento potenciador del turismo y de la economía regional”.
Los participantes en el curso, muchos de ellos con trabajos en establecimientos hosteleros, han estudiado maridajes y armonías entre bebidas y carnes y pescados, en función de su origen y de sus propiedades nutricionales.