La menor, que cursa tercero de primaria, está escolarizada en el Centro desde etapa infantil, haciendo uso desde entonces del servicio de comedor, sin que hasta la fecha hubiese sufrido algún episodio de agresión similar.
En el escrito dirigido a la Inspección de Educación, al que ha tenido acceso Lanza, dicen que la chica, “ha asistido al colegio con total normalidad, contenta e integrada perfectamente con su clase y sus amigas desde el primer curso”.
En este mismo escrito, señalan que “el comedor escolar atiende a alumnos de primaria, de 6 a 12 años y de ESO, de 12 a 16 años en el mismo tramo horario. Durante este espacio de tiempo, aproximadamente de 13:30 a 15:00, no hay presencia de profesores en los patios y pasillos y el colegio habilita un único aseo para ambos géneros”.
Así, entre los hechos denunciados ante Policía Nacional, exponen que el 29 de septiembre, cuando la menor acudía al baño, fue interceptada por otro estudiante de unos 15 años, edad que no han podido precisar hasta la fecha, y allí el supuesto agresor profirió expresiones como: “¿Qué haces aquí, puta de mierda? No eres más que una estúpida”, según consta en el texto de la denuncia.
Tras varios insultos a gritos, el chico se marchó, sin que se cometiesen otras supuestas agresiones.
Conocidos los hechos, la familia de la víctima se puso en contacto con el colegio para dar cuenta de lo ocurrido, “sin que se hayan tomado medidas contra el agresor y sin que se nos hayan dado las explicaciones oportunas, haciéndose parte responsable de lo sucedido”, critican desde la familia.
Así, en el escrito dirigido a la Inspección, piden que se tomen “medidas ejemplarizantes”. Del mismo modo, alegan, “dada la extrañeza de la forma de actuar del chico, acosando a una niña mucho más pequeña, sugerimos un seguimiento intenso por parte de psicólogos que le ayuden a eliminar esos sentimientos de violencia ante niñas pequeñas”.
El colegio, en un comunicado, “rechaza toda actuación que comporte acoso o violencia física o moral”
Por su parte, la dirección del Colegio, en forma de comunicado, ha manifestado a Lanza que “rechaza toda actuación que comporte acoso o violencia física o moral”, informando que, se actuó “en cuanto se tuvo conocimiento de los hechos según normativa recogida en las Normas de Convivencia y Funcionamiento del Centro (NCOF)”.
Por otro lado, diferencian que “no se trata de un caso de acoso escolar sino de una conducta de indisciplina contraria a las normas del Centro y, como tal, el Colegio ha actuado con contundencia y rapidez con la sanción correspondiente”.
Finalmente, desde la dirección han informado que “se ha atendido la disconformidad de la familia afectada ante las medidas adoptadas, aun cuando se consideran más educativas para que tal hecho no vuelva a suceder, y que se le ha atendido desde la dirección y desde la coordinación de comedor en todo momento”.
Además, critican, “se le ha dado la oportunidad de agotar todas las vías de las que el Centro dispone, llevando el caso a revisión por el Consejo Escolar, si bien la familia no ha respetado los tiempos para poder darle las conclusiones de dicho Consejo”.