Un centenar de vecinos del popular barrio de Los Ángeles ha querido rendir este viernes un sentido homenaje al que durante más de cuatro décadas ha sido y es su párroco, el sacerdote Francisco Romero García. Apenas pasaban unos minutos de las nueve de la tarde cuando se descubría un monolito que recuerda su figura en los jardines de la recién remodelada Plaza de Jesús Cautivo, un emotivo acto que ha servido, también, para presentar la nueva imagen de la plaza que, desde finales del pasado mes de febrero, ha estado en obras.
Antonio Fernández, de la Asociación de Vecinos Carlos Eraña, explicaba que Francisco Romero es el “buque insignia” de este barrio, un hombre muy querido que ha llevado a cabo, a lo largo de sus ya más de cincuenta años de sacerdote, una gran labor entre los vecinos. Igualmente, explicaba que la instalación de este monolito ha sido una iniciativa conjunta de la propia asociación de vecinos, la Hermandad del Prendimiento y la Hermandad de Nuestra Señora de Los Ángeles.
Emocionado por tanto cariño
El propio Francisco Romero se mostraba emocionado por tanto cariño y agradecía, tanto a la Corporación municipal actual como a las anteriores, el trabajo que poco a poco se ha ido realizando en el barrio. También tuvo palabras de agradecimiento para sus feligreses, amigos y vecinos, no ocultó su emoción por este monolito con un grabado de su imagen, en el que se puede leer “Dedicado al Rvdo. Padre D. Francisco Romero García por una vida entera de trabajo y entrega a su querida parroquia, ayudando a los más necesitados del barrio de Nuestra Señora de Los Ángeles”, y animaba a todos a seguir trabajando por esta comunidad y a cuidar de esta nueva plaza a la que da acceso la parroquia.
Este sencillo acto, en el que estuvieron presentes varios concejales del Ayuntamiento, culminó con la proyección de la película “Verano 1993”, en la propia plaza, dentro del ciclo de “Cine de Verano en los barrios” que organiza el Ayuntamiento de Ciudad Real.
