Este fin de semana arranca la segunda vuelta en el Grupo F de la Primera Nacional masculina de balonmano. Comenzará el BM Caserío con un partido este sábado en el pabellón Quijote Arena que tratará de ganar ante el Helvetia BM Triana (18:15 horas). Dos puntos en juego muy importantes para un equipo de Ciudad Real que es tercero en la tabla, a cinco puntos del líder Ikasa y a cuatro del segundo, el Pinto, los rivales en las dos primeras plazas de play off de ascenso. Cuarto es el otro provincial, el BM Bolaños, con 21 puntos.
“Comenzamos esta segunda vuelta con mucha ilusión después de haber sacado adelante los dos últimos y complicados partidos. Nuestro objetivo es seguir mejorando en busca de alcanzar nuestro mejor nivel”, apuntó Santi Urdiales, técnico del Caserío, que reconoció que “estamos en desventaja con esos rivales, pero queda mucho y en la liga hay mucha igualdad”.
La mirada de todos los integrantes del equipo de Ciudad Real está puesta solo en este próximo envite ante el Triana. “Será un partido duro, ante un equipo con una plantilla competitiva que nos va a poner a prueba”, avisó Urdiales, recordando que el capitán y líder del cuadro sevillano es el pivote Juan Andreu, el que fuera internacional absoluto con la selección española.
Los lesionados Enrique Chacón y Rodrigo Martín-Pozuelo seguirán siendo baja para este encuentro, además de las dudas de Fran Vidal y de Javi Torre ‘Jabato’, con problemas físicos de diversa índole.
El que debutará con la camiseta del BM Caserío será el argentino Leo Werner, un primera línea que ha llegado al equipo de Ciudad Real desde su país tras ser internacional juvenil y júnior. “Estoy contento con él, es el perfil de jugador que buscábamos y de aquí al final nos va a dar muchas opciones en los tres puestos de la primera línea”, analiza Urdiales sobre el nuevo jugador.
Leo Werner habló también en la previa del partido ante el Triana y aseguró haber encontrado “un grupo muy unido, en el que todos van hacia el mismo lado”. Con el objetivo de ayudar al Caserío a conseguir el ascenso, el argentino también reconoció que “uno de mis objetivos es aprender del ‘handball’ español” y afirmó “sentirse más cómodo por la derecha, pero si me toca jugar en el otro lado o de centro puedo sumar”.
Leo es hermano de Thomas Werner, extremo que militó hasta la pasada temporada en las filas del Caserío y que juega actualmente en el BM Bolaños, un rival directo en este Grupo F de la Primera Nacional. “Él me dijo que aquí me iba a encontrar muy bien y por eso decidí venir. Será la primera vez que tenga a un hermano como rival. En la pista seremos rivales, fuera somos hermanos”, finalizó.