Los vecinos y vecinas de El Pardillo ha vivido una jornada de reencuentro como cada primer domingo de septiembre en el que celebran sus fiestas en honor al Corazón de María. Una misa y una invitación ha servido de reunión para los habitantes de esta pequeña aldea que pertenece a la capital.
Una día que comenzaba con la misa en honor al Corazón de María en la que no cabía un alfiler y continuaba con una invitación en la que los vecinos se han reencontrado y ha compartido unos momentos de convivencia. Así se lo comenta a Lanza el representante de la aldea, José Díaz, que explica este es el que es único día del año en el que vuelves a ver a algunos vecinos que viven fuera y es una manera también de despedir el verano ya que muchos vuelven a sus lugares de residencia.
Una tradición, la de la celebración del Corazón de María el primer domingo de septiembre, que se ha transmitido de padres a hijos, tal como explica María Jesús, una vecina que participa en la invitación de después de misa. Cuenta como hace años era el fin de semana entero y se hacían actividades para los niños, traían un chiringuito y había baile.
Algo que también comenta Angelines, y recuerda como venía la banda municipal de Ciudad Real y se quedaba en casa de su abuelo, que era el alcalde por aquellos entonces de El Pardillo. Confiesa que tiene muy buenos recuerdos de esta celebración durante su infancia.
Y es que según comentaba la concejal de Participación Ciudadana, Mar Sánchez, que ha acompañado a los vecinos y vecinas de El Pardo en la misa y ha participado en la invitación de después, es una jornada en la que también se recuerdan anécdotas y a los que ya no están. Para la concejal es importante que el Ayuntamiento siga trabajando y apoyando a tradiciones como esta.