Quedaban apenas dos palabras para que Míriam Fernández terminara su canción cuando Pablo López, Antonio Orozco y Luis Fonsi, coaches de ‘La Voz’, apretaron al unísono el botón y se giraron, con la piel erizada, al igual que el aforo lleno del salón de conciertos del antiguo Casino que revivió este martes este importante momento en la trayectoria de la también conferenciante motivacional y actriz mediante una proyección al tiempo que cantaba en la gala de los VI Premios del Patronato Municipal de Personas con Discapacidad.
Míriam Fernández, que sufrió una parálisis cerebral al nacer, guió con la narración de emotivas experiencias de superación la celebración de este encuentro celebrado con motivo del Día Internacional de las Personas con Discapacidad y en el que se reconoció a grandes luchadores como Jesús Mora, ejemplo de superación que ha realizado un gran labor de sensibilización en torno a la esclerosis múltiple, y Apafes, que trabaja en la atención e inclusión social y laboral de las personas con enfermedad mental.
Los premios los entregaron la alcaldesa, Pilar Zamora, y la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco, que anunció que el Gobierno regional reflejará en los presupuestos una inversión de 1,3 millones de euros destinada a la contratación indefinida de personas con discapacidad. “Han sido 128 las que se han podido contratar en 2019 y aspiro con esos fondos llegar al menos a 300 personas”, comentó la consejera, quien se emocionó cuando entregó el galardón a Jesús Mora a quien conoce desde niña.
“La vida es mucho más que las fronteras que a veces nos ponemos”, expuso Franco, que también felicitó a Apafes por su trabajo y reivindicaciones, recogiendo el guante en relación con las competencias de su Consejería encaminadas a empleo e inserción laboral. Así mismo, quiso aportar luz y esperanza, indicando que “estamos en un 45,9 por ciento de tasa de actividad de personas con discapacidad lo que supone once puntos por encima de la media nacional”.
Sorprendido y feliz por el premio, Jesús Mora expresó su agradecimiento a los amigos que no sólo no han huido cuando le diagnosticaron esclerosis múltiple sino que se han incrementado durante este período, así como a sus hijos que no paran de lanzarle ‘flotadores’ para afrontar las dificultades y su mujer que “siempre está pensando” en él y le tiene en su corazón y cabeza. Pese a las numerosas dificultades al enfrentarse a la enfermedad que padece, estimó que es menos complicado teniendo un círculo de amigos, una familia como la suya y una economía estable, pero recordó que hay personas con su patología que sufren, así mismo, la soledad y la pobreza, que no tienen familia o que viven, por ejemplo, en viviendas sin ascensor.
En su intervención, Mora abogó por la accesibilidad, que “muchas veces se puede resolver con un poco de voluntad”, y la ciudad inclusiva, además de animar a las personas con discapacidad a no distanciarse y buscar la inclusión social, a pesar de las trabas y sin olvidar las reivindicaciones, de manera alegre y positiva.
También mostró su satisfacción por el galardón María José Calderón, presidenta de la Asociación de Salud Mental Apafes, porque “nos da fuerza y hace ver que no estamos solos” ante la lucha contra el “gran estigma” asociado a estas patologías que es como “una roca difícil de mover pero que entre todos lo conseguiremos hacer”, logrando que se vea como una enfermedad más sufrir, por ejemplo, esquizofrenia ya que “hoy hablamos de recuperación puesto que cada día los programas más personalizados tienden a que las personas pasen enseguida a una vida normalizada”.
“Queremos que las administraciones estén ahí, nos ayuden y podamos seguir adelante”, agregó Calderón, que resaltó que este reconocimiento a esta asociación creada en 1991 “nos viene muy bien” ante importantes retos como “conseguir un centro de rehabilitación nuevo” para contar con unas instalaciones adecuadas para los afectados, objetivo que confió en que se pueda conseguir en 2020.
En la gala, a la que acudieron la diputada nacional del PP, Rosa Romero, y el ex presidente de la Diputación, Nemesio de Lara, Míriam Fernández proporcionó todo un empuje de motivación y coraje con sus vivencias personales, que comienzan en el momento de nacer ya que sufrió una falta de oxígeno en el parto que, según el primer diagnóstico que le dieron, la llevaría a lograr como mucho a los quince años arrastrarse por el suelo utilizando los codos. Su joven familia biológica reconoció “humildemente” que no podía cuidarla y la entregó en adopción a la familia Fernández convirtiéndose en la pequeña de siete hermanos con una infancia llena de juegos dirigidos a que se moviera. A los cuatro años, dio sus primeros pasos gracias a la “entrega, esfuerzo y amor”, agregó Fernández, que resaltó que su familia no permitió que se rindiera y con ella, junto con la fisioterapeuta, aprendió a caerse bien con el cuerpo, pero también con la cabeza y el corazón, así como a levantarse.
En el colegio, pasó años de bullying a los que se enfrentó cuando comprendió que podía seguir compadeciéndose o tomar la decisión de ser feliz centrándose en lo que funciona con la clave de pensar no en su discapacidad sino en sus capacidades, comentó Fernández, que ahora se dedica al teatro y la música. Así mismo, recordó cómo cuando tenía 14 años en un mismo día su padre sufrió un derrame cerebral por la mañana y su hermana Rocío por la tarde un infarto cerebral que le originó una hemiparesia de la parte izquierda del cuerpo, de manera que su experiencia en afrontar la discapacidad se transformó en una herramienta para ayudar a su hermana, con lo que su debilidad se convirtió en una gran fortaleza.
Fernández, que relató con humor los múltiples usos que descubrió en su adolescencia de su andador como ropero, para colocar el bolso, portacubatas y espantador de chicos superficiales, animó a luchar por las pasiones que motivan a cada persona, a aceptarse cada uno como es y a “dejad que vuestra sonrisa cambie el mundo pero que jamás el mundo cambie vuestra sonrisa”.
La gala fue un estímulo para seguir trabajando en favor de la lucha por la superación de barreras, incluida la de la soledad, y la mejora de prestaciones, comentó Pilar Zamora, que resaltó que en el equipo de Gobierno “nos creemos la accesibilidad y trabajamos por ella”, así como por ciudadanos en igualdad de derechos, premiando, así mismo, a quienes trabajan porque sea una realidad.