Sí a la libertad, a la vida, a todos y a organizar la democracia dialogando y no a la ira del Estado ni a la muerte son algunos de los ‘diez mandamientos’ de ‘El Decálogo de la Democracia’ de José Ortega que se exhibe desde este miércoles en la Escuela de Arte Pedro Almodóvar.
Sencillo y sofisticado al mismo tiempo, siendo “ése el gran arte realmente y en gráfica mucho más”, es un decálogo para “ser un ciudadano socialmente responsable y que cada ciudadano sea capaz de liderar su proyecto de vida”, comentó Ana Cortijo, hija de Paco y Lola Cortijo, fundadores del Grupo Sevilla de Estampa Popular, uno de los ocho que en todo el país impulsó Ortega en una firma apuesta por el grabado para, por su capacidad de reproducción, llegar con sus obras “a todo el mundo, a las grandes galerías de arte pero también a la clase obrera y barrios”.
Cortijo, que habló en la Escuela de Arte del trabajo conjunto de sus padres con el artista natural de Arroba de los Montes, resaltó que “Ortega es un personaje crucial en la historia del arte contemporáneo en España. El movimiento que creó es único, en él participaron todos los grandes artistas de vanguardia españoles de la segunda mitad del siglo XX, los que luego han sido informalistas, abstractos o figurativos”.
Ortega “consiguió hacer una llamada a todos los trabajadores del arte español que estaban exiliados, volvieron a España y con su trabajo, aunque pareciera que era una idea inocente, fue útil, lucharon contra la dictadura y por los derechos humanos y la democracia”, expuso Cortijo, que lamentó que el artista ciudarrealeño sea “hoy un personaje injustamente e intencionadamente olvidado. Las personas excepcionales como él que no se alinean con el poder siempre son difíciles de integrar, aunque sean bellísimas personas como era su caso, porque era un intelectual crítico”. Durante muchos años se ha dejado que su legado empezara a olvidarse. “Hay obra suya en el Reina Sofía pero no tenemos un Museo Ortega en Ciudad Real, no hay un lugar donde ver su obra en Ciudad Real y no se transmite a los estudiantes en los colegios el valor de su obra siendo un personaje fundamental en la historia del arte en España”.
La ‘joya de la corona’ de la muestra ‘Ortega + Estampa Popular’, instalada en la Escuela de Arte hasta el 13 de noviembre, es ‘El Decálogo de la Democracia’, una obra de gran valor “no solamente por el contenido político y social, aunque en realidad de lo que habla es de derechos humanos, de recuperación de los derechos humanos que se habían perdido en España con la dictadura, sino que desde el punto de vista artístico es excepcional porque es una obra de madurez de Ortega donde sus recursos estilísticos están perfectamente recogidos: hay unas síntesis muy expresivas, unas figuras que dicen mucho con muy poco y que además técnicamente para los que somos especialistas en técnicas de estampación es de lo mejor que puedes ver. Es sumamente sofisticado, a la par, que sencillo. El oficio de Ortega en este trabajo es excepcional”.
Así mismo, la muestra incluye una amplia variedad de material como vinilos con sus ilustraciones de cantautores como Paco Ibáñez y Chicho Sánchez Ferlosio, catálogos de sus exposiciones en medio mundo, la edición en gran formato del libro ilustrado ‘Simón Bolívar’ que elaboró para Venezuela en el año 80 y carteles de muestras del artista manchego en Italia, Alemania, Francia y Ciudad Real, además de grabados del Grupo Sevilla de Estampa Popular de Sevilla.
En la muestra, también se recogen firmas para la concesión a Pepe Ortega y Estampa Popular de la Medalla al Mérito de las Bellas Artes, campaña que ya cuenta con más de 1.500 apoyos, parte de los cuales llegados desde otros países.
