Quince días después de lo que él tiene claro que fue “un cese” como técnico del CD Manchego, Javi Sánchez ha roto su silencio para contar su versión y sus sensaciones después de que el presidente, José Juan Bedoya, tomara la decisión de, como dijo, “relevarle” con el equipo en la primera posición del Grupo XVIII de Tercera RFEF. Un tiempo desde entonces en el que el míster toledano se ha refugiado en la familia y se ha visto arropado por los amigos y por muchos mensajes de ánimo y reconocimiento, comenzando ya últimamente de nuevo a estar pendiente del fútbol.
“Fue una decisión caprichosa por lo personal, que pudo y puede todavía poner en riesgo una situación que era buena”, calificó Javi Sánchez, para quien fue tomada por “desacuerdos con el presidente, porque tenemos una manera opuesta de ver el fútbol y de manejar las situaciones reales. Llevábamos chocando desde hacía tiempo”. En ese sentido, añadió que “últimamente no había ninguna relación. Yo tenía claro que esta relación no iba a tener futuro, pero no se me pasó por la cabeza que con resultados normales fuera a tomar esa decisión”, dejando claro que “no hubo ningún problema por parte mía, ni de Guti (su segundo)”.
Javi Sánchez consideró “absurdo” el argumento expuesto por Bedoya en la rueda de prensa en la que anunció esta decisión, que fue el de no sentirse identificado con el juego del equipo, pese a esa primera posición en la que se encontraba. “Estoy seguro y deseo que el Manchego va a conseguir el objetivo, porque eso dará más fortaleza al trabajo que hemos hecho. Pero también estoy seguro de que no va a hacer el juego preciosista que dice”, aseguró.
El ex entrenador mancheguista confesó haber sentido una gran “rabia y frustracción” cuando se le comunicó el cese. “Te sientes muy mal, sientes que están quitando tu parte de mérito y de disfrute, porque llegábamos en buena posición a final de temporada. Se nos ha privado de poder conseguir una cosa muy bonita”.
Javi Sánchez se mostró también sorprendido porque el nuevo técnico, Cristian Paulucci, se sentara en el banquillo el pasado domingo en Puertollano. Sobre ello explicó que todavía no habían llegado ni él ni su segundo, Guti, a un acuerdo de pago con el Manchego, conociendo luego que sí hay sin su consentimiento un acuerdo del club con la Federación de Fútbol de Castilla-La Mancha al demostrar garantías de pago y reconocimiento de la deuda.
Precisamente, el entrenador ha visto esos dos últimos partidos con Paulucci a los mandos y analizó que el juego “ha sido muy parecido a lo que había. No se ha visto el fútbol preciosista, ni alineaciones distintas, ni nada por el estilo. Sí se ha visto el grupo unido y compacto que había, que tiene pegada y que tiene las ideas muy claras”, cerró.