Jueces de vigilancia penitenciaria de toda España reclaman una legislación específica que les permita abordar cuestiones prácticas, del día a día, que por el momento resuelven con encuentros técnicos como el que acoge esta semana Ciudad Real.
Antonio Moreno de la Santa, titular del juzgado de Vigilancia Penitenciaria 1 de Castilla-La Mancha, con competencias en las prisiones de Herrera de La Mancha, Alcázar y Albacete, es el anfitrión de las jornadas 2019 para fijar criterios relativos a la aplicación de la prisión permanente revisable. La perspectiva de género en los centros penitenciarios, en los que la presencia de la mujer es muy pequeña, y la situación de las personas con discapacidad que cumplen condena, son otras de las cuestiones destacadas del encuentro.
Aplicación de la prisión permanente revisable
“Se están produciendo pronunciamientos jurisdiccionales interesantes de los órganos judiciales en lo que respecta a la prisión permanente revisable, y es posible que en un futuro si se consolida esta regulación haya que pronunciarse sobre el particular”, ha apuntado Vicente Rouco, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, que ha asistido a la inauguración del encuentro.
Garantizar los derechos de los internos
Rouco, que según ha desvelado se estrenó como juez de vigilancia penitenciaria en los años ochenta, ha recalcado que se trata de “una figura importantísima”, que aparte de la función represiva (garantizar que se ejecuten las sentencias), tiene otra función igual de relevante que es la de tutelar y garantizar que se cumplan los derechos de los internos.
Ponencia: ‘Mujeres presas’
Las jornadas, que entre jueces y ponentes reúnen a unas treinta y cinco personas hasta el jueves en la capital, han comenzado con la ponencia ‘Mujeres presas, una perspectiva de género sobre su acceso a los beneficios penitenciarios. Problemática de los internos discapacitados en prisión’, a cargo de Ángel Yuste, experto en gestión penitenciaria y secretario general de Instituciones Penitenciarias entre 2011 y 2018.
“El derecho penitenciario estaba establecido para las penas privativas de libertad, ahora los cambios legales plantean cuestiones de todo tipo relativas a la ejecución de trabajos en beneficio de la comunidad, libertad vigilada o la prisión permanente revisable”, recalca Moreno de la Santa.
Oficina judicial: necesita mejoras
El juez de Vigilancia Penitenciaria de Ciudad Real también ha reclamado una oficina judicial especializada en esta materia. “La centralización de los servicios judiciales en una sola oficina en los juzgados de la capital complica el día a día de este juzgado, que tiene peculiaridades propias”, ha subrayado.
Videoconferencias
El avance técnico que sí da buenos resultados es la implantación de la videoconferencia para celebrar vistas, escuchar a los internos o facilitar que testifiquen. “En su momento se agilizaron los trámites, ahora está previsto aumentar los sistemas de transmisión de datos de imagen con los centros penitenciarios”.
En Castilla-La Mancha hay dos juzgados de Vigilancia Penitenciaria, el número 1 del que es titular Moreno de la Santa, con sede en Ciudad Real, y el 2 con sede en Ocaña (Toledo) que atiende los centros penitenciarios Ocaña I, Ocaña II y Cuenca.