Este viernes, la Casa de la Ciudad de Ciudad Real ha acogido la inauguración de la exposición de cuadros de Beatriz Álvarez que será visitable hasta el próximo 28 de diciembre.
La exposición, compuesta de más de una decena de obras, señala la autora en declaraciones a Lanza, «surge porque llevo acumulando obra desde hace tiempo y tenía la necesidad de mostrarla al público».
El estilo de Álvarez se caracteriza por la combinación de colores vibrantes, expresivos, formas asimétricas, curvilíneas, patrones inacabados y laberínticos, que entremezclan con las telas. Sus pinturas son retratos que sumergen al espectador en un espacio teatral donde aparecen mujeres idealizadas, que en parte son iconos y en parte sueños.

«Procuro transmitir fuerza en lo que pinto, destaco el color y la búsqueda de lo recurrente a través de lo que muestro», precisa la pintora.
Sobre la temática que se va a encontrar el espectador, apunta Álvarez, «está sobre todo la figura de la mujer y lo que ésta representa. Yo pinto lo que veo, aunque parezca mentira, siempre me baso en una realidad, luego ya la realidad la veo desde mis ojos y desde mi punto de vista, siendo la mujer la gran protagonistas».
De hecho, expresa, «las pocas figuras masculinas que aparecen, están afeminadas. Todos tienen corazón y alma de mujer, porque si de las que creo que la mujer es el portal que abre el mundo y me sale eso en mis cuadros».



A lo largo de estos años de pintura y caballetes, los pinceles han sido el pie para poder expresar emociones que de otra forma quedan mudas. «Tengo necesidad de expresarme pintando. Me he dado cuenta que muchas cosas de las que no soy capaz de decir las vivo con la pintura».
Esa emoción y esa capa de sensaciones, son las que quiere llegar hasta los que llegan a conocer sus cuadros. «Espero que el espectador capte la emoción. Me da igual cuál sea, pero quiero emocionar».