La aragonesa compañía teatral Facultad Mermada llega al Teatro de La Sensación para representar el viernes 14 de febero, a las 21 horas, y el sábado 15, a las 21.30 horas, la obra ‘La elegida’, una comedia que muestra una visión diferente de la maternidad. Dirigida por Pep Villa, ofrece una visión divertida y desdramatizada de un tema que parece ‘intocable’. Helena Castillo interpreta a Concepción García Atiénzar en esta representación que convierte los temas serios en auténticos disparates.
Concepción García Atiénzar no puede obviar lo evidente y por eso está aquí, para contar con su perversa ingenuidad que está metida en un compló. Las señales que empezó a percibir en el funeral de su marido siempre la acompañan, indicándole el mejor de los caminos, como si fueran su ángel de la guarda.
“Pero ahora… Ahora la empujan hacia una misión que parece ‘imposible’. Incrédula al principio, escurridiza después y finalmente resignada, Concepción asume que ella es ‘La Elegida’. ¿Por quién? ¿Quién envía esas señales? ¿Quién está detrás de todo esto? No sabe. Y tampoco se lo pregunta. Tan solo sigue las señales…, que son inequívocas y están por todas partes. No dejan lugar a dudas y todo el mundo habla bien de ellas. ¡Cómo te cambian la vida! Qué fantástica y maravillosa experiencia es la maternidad… ¿Cómo no vamos a querer ser madres?”, expone la compañía teatral.

“Pero queridos amigos del planeta azul, ¿es realmente cierto? ¿No habrá detrás un compló intercontinental, una organización secreta que nos empuja poco a poco hacia un callejón sin salida? Antes de llegar a este callejón pasaremos por la calle de la inconsciencia, el jardín de las delicias y el paseo de las dudas. Y ya en el parque de las vanidades, sentados en un banco, con el trinar de los pajarillos, un aire agradable nos acariciará con imágenes bonitas y tiernas, nos rodeará con la suavidad de los algodones, hipnotizándonos con el olor a colonia y los polvos de talco, hasta decir: ¡queremos ser madres!”, plantea la compañía.
Concepción García Atienzar, ‘La Elegida’, es la protagonista. Está sola ante el peligro. Sin escudo ni coraza se muestra tal y como es. Viene armada con la generosidad de los ingenuos con la tozudez de sus convicciones, con la gallardía de los locos y expone sin censura su fragilidad. Lo entrega todo para jugar, con el objetivo de convertir algunas cosas ‘serias’ en verdaderos disparates.