José Manuel Lomas, condenado a seis años y tres meses de cárcel por matar al intruso que se coló en su finca de La Atalaya de Ciudad Real, de dos disparos de escopeta en agosto de 2021, recurrirá la sentencia al Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha y si hiciera falta al Tribunal Supremo. El objetivo es conseguir una rebaja de la pena (que ya es de las mínimas por homicidio) o incluso la absolución, según ha contado este sábado su abogado Juan Manuel Lumbreras Ruiz.
“Existe una falta de fundamentación y una mala aplicación de la norma”, opina el letrado tras examinar la sentencia dictada por la experimentada magistrada de la sección segunda de la Audiencia de Ciudad Real Mónica Céspedes, en base al veredicto del jurado del caso. Lumbreras entiende que se debía rebajar la condena en dos grados en aplicación de la eximente incompleta y la atenuante que se reconoce al jubilado, y reprocha a la magistrada que solo haya rebajado un grado.
La fiscalía, que pidió doce años y medio por el homicidio, un delito castigado en el Código Penal con penas de entre diez y quince años de prisión, según las circunstancias, terminó solicitando seis años como pena más ponderada. La magistrada ha condenado a Lomas a seis años y tres meses, en una sentencia que se hizo pública este viernes, en la que habla de la «falta de escrúpulos y humanidad» con la que se comportó el acusado aquella noche.
Quiere seguir en libertad hasta que se resuelva su recurso
La intención de la defensa es que el octogenario siga en libertad provisional, con las medidas adoptadas hasta ahora, hasta que se resuelva el recurso ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, y lo solicitará en el trámite de ejecución de sentencia, que es el que toca en los próximos días.
El abogado defensor insiste en que Lomas “debe ser absuelto, más sin tenemos en cuenta toda la prueba practicada, que es beneficiosa para esta parte, pero que sin embargo no se ha tenido en cuenta”, afirma.
Indemnización a la familia de la víctima: 153.000 euros
Respecto a la responsabilidad civil directa que la magistrada endosa a la aseguradora Mapfre España, hasta el límite de la póliza de cobertura del permiso de armas (90.000 euros) que tenía el librero jubilado cuando disparó, Lumbreras aclara que Lomas tendrá que pagar el resto, hasta los 153.000 euros de indemnización a la familia que impone la sentencia y no está de acuerdo.
Sostiene un argumento que la propia magistrada rebate en su sentencia con jurisprudencia, el de que “la persona que infringe la ley al entrar en una vivienda ajena asume un riesgo”.
Lomas, culpable de homicidio con eximente de trastorno psíquico y atenuante de confesión
José Manuel Lomas, juzgado por un jurado popular la semana pasada en la Audiencia Provincial de Ciudad Real, ha sido declarado culpable de un delito de homicidio, con la eximente incompleta de trastorno psíquico y la atenuante de confesión. El jurado entendió que en su caso no cabe la legítima defensa, tal y como recoge el Código Penal en España.
El hombre al que disparó no iba armado, entró en su propiedad pero no en su vivienda, y estaba agachado en la oscuridad cuando Lomas, obsesionado por seguridad y con armas cargadas en su habitación, salió al patio de su finca y al comprobar que podía haber entrado alguien disparó dos tiros con los que mató casi en el acto al intruso, un joven de 35 años, con antecedentes policiales por robo. Volvió a entrar en la casa, cargó de nuevo la escopeta, y disparó un tercer tiro que ya no le dio al intruso, que murió desangrado en su patio.
Después llamó a la Policía Nacional y contó lo que había hecho, aunque insistió en el juicio que creyó disparar “a un bulto”.