La Iglesia de San Pedro en Ciudad Real ha llevado a cabo un minucioso ajuste en su reloj y campanas, que forman parte esencial de la identidad histórica y cultural del templo. El reloj, con sus características agujas y ventanas de arco gótico, ha sido calibrado para garantizar la precisión de la hora, mientras que las campanas han sido revisadas para asegurar que sus repiques mantengan la calidad y el ritmo tradicionales.
Este mantenimiento sirve para preservar el patrimonio histórico y para mejorar la experiencia acústica para los feligreses y los habitantes de la ciudad, ya que en los últimos tiempos los toques de campana estaban desajustados, según algunos testimonios.
Las campanas de San Pedro van fuera de hora. Sonaron a 8.26 y ahora a 8.52. ¿O están de pruebas? Siguen… @diocesiscr @wikiCR
— PepaCampillos (@PepaCampillos) June 12, 2024
Después del terremoto de Lisboa, que afectó a la Iglesia de San Pedro, se decidió construir una torre-campanario -siglo XVIII- con el objetivo de reforzar y estabilizar los muros ubicados al pie de la iglesia y en la fachada sur, se optó por construir una torre-campanario integrada en la iglesia y adosada al muro. Esta medida busca solucionar el posible vuelco de los contrafuertes más cercanos a los pies de la iglesia.
La torre, integrada en la iglesia al estar adosada al muro, se eleva por el lado suroeste de la planta. Tiene una base de aproximadamente un metro de altura y dos grandes cuerpos de igual altura, siendo el primero un poco más grueso que el segundo. Este segundo cuerpo tiene dos vanos a cada lado y alberga las campanas.

El tercer cuerpo, de menor tamaño, está decorado con escudos heráldicos. El chapitel de pizarra, de estilo neogótico, fue construido en el siglo XVIII. Cuenta con dos relojes de aguja, cuatro pequeñas ventanas de arco gótico con el escudo del Vaticano sobre ellas y una pequeña campana con techumbre que corona la torre.