Las consultas realizadas en la Oficina Municipal de Información al Consumidor ascendieron en 2019 a 3.445 frente a las 3.296 del ejercicio anterior, siendo una cifra que se aproxima a las 3.534 de 2016, expuso la concejal de Consumo, Ana Belén Chacón, que consideró positivo que los usuarios y consumidores aclaren dudas con estas consultas, estén bien informados y obtengan un buen conocimiento, lo que contribuye a que luego se produzcan menos denuncias y reclamaciones.
En cuanto a las quejas, sobre todo cuando se estima que ha habido una mala prestación de servicio o falta de información sin que se vulnere la ley, se registraron en 2019 un total de 52 frente a las 57 del año anterior, indicó Chacón, que resaltó que hubo una denuncia, al igual que en 2018, y 811 reclamaciones, las cuales llegaron a 935 un ejercicio antes.
Los sectores que generan más consultas y reclamaciones son los de comunicaciones y suministros eléctricos. En el primer apartado, están los mensajes no solicitados, las tarificaciones incorrectas, las deudas reclamadas que no son reconocidas y el cobro de servicios no contratados, mientas que en el segundo, facturaciones estimadas cuando existe contador y los cortes de la luz. Les siguen el sector de electrodomésticos en relación con reparaciones y diagnósticos de reparaciones incorrectos; las agencias de viajes sobre cancelaciones o por hoteles con categorías inferiores; reparaciones de vehículos por diagnóstico mal efectuado de arreglos; y los bancos y cajas por cláusulas suelos, hipotecas, comisiones y gastos de cancelación de cuentas.
Campañas y charlas
Chacón, que resaltó que la Omic proporciona información general en materia de consumo, asesora y orienta sobre los organismos competentes para la resolución de las materias que excedan su ámbito de actuación, recibe reclamaciones y denuncias formuladas por los consumidores y media en los conflictos entre los consumidores y empresas, señaló que desde el Servicio Municipal de Consumo también se impulsan campañas divulgativas sobre los asuntos más consultados y de diversos temas como la reducción del uso de bolsas de tráfico, la reparación de electrodomésticos, el ahorro de agua, el consumo eléctrico y los juguetes no sexistas.
Así mismo, ofreció charlas en 2019 sobre transformación de alimentos del campo a la mesa, nutrición, gestión de economía doméstica y ahorro energético, colaborando en la promoción de los productos de la tierra, así como del Mercado Municipal y el mercadillo.
El Servicio Municipal de Consumo cuenta, además, con dos inspectoras que, velando por la seguridad, realizaron en 2019 un total de 10.538 actuaciones de inspección a raíz de las campañas programadas por la Junta, denuncias, de oficio, en ferias, verbenas y eventos, en mercadillo y por redes de alerta.
En la Memoria de 2019 del Servicio Municipal de Consumo explicada por Chacón, también se refleja que, en la actualidad el Mercado Municipal cuenta con 68 puestos o casetas, de los que hay 21 libres y 47 están ocupados. En el mercadillo municipal de los sábados están ocupados 155 puestos, de los que 118 son de polivalencias y 37 de alimentación. En materia de venta ambulante, el año pasado se autorizaron tres licencias para venta de velas, dieciséis licencias para flores y uno de frutos secos, cuatro licencias para la venta de caridades en San Antón y San Blas y dos autorizaciones para la venta de castañas asadas.