La ola de calor (al menos cuatro días seguidos con temperaturas más altas de lo normal) que estamos padeciendo desde la segunda semana de junio ha dejado una anomalía térmica en Ciudad Real de siete grados por encima de lo normal, tanto en las máximas como en las mínimas.
La secuencia de mayor calorazo registrado en junio desde 2003 empezó el 7 y se prolongó hasta el 19. En todas esas jornadas tanto las máximas como las mínimas fueron de casi siete grados por encima de lo habitual, según datos del observatorio de la Aemet en la capital. Y aunque ha habido un leve respiro por lo alto (no se han registrado valores históricos) en los últimos doce días las mínimas no han bajado de los 22-23º, de ahí que el calor se perciba como más insorpotable.
La ola remite al fin, pero no se notará hasta el martes
En este camino de récord por el que se ha precipitado el mes de junio, cabe destacar la notable bajada de las temperaturas en la mayor parte del país desde este domingo, con 36 grados de máxima previsto en Ciudad Real y una nueva noche “tropical” de 23.
A partir del lunes la cosa mejora pero será sobre todo en la jornada del martes cuando por estas latitudes se note el “bajón”. La noticia según los pronósticos es que el martes las temperaturas máximas no superaran los 31º y que las mínimas se queden en 19.
El calor acumulado en estas semanas también podría provocar tormentas y chubascos más probables al oeste y menos, o en cualquier caso dispersos en el este, sobre todo por la tarde.
Con un junio así la Aemet ya ha pronósticado esta semana en la que ha empezado oficialmente el verano que julio y agosto serán también más cálidos, por lo que conviene armarse de paciencia y seguir las recomendaciones sanitarias para evitar golpes de calor.
Verano saludable
El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha colgó el viernes en su web la campaña verano saludable 2017, en la que se dan todas las recomendaciones y habrá información puntual de la evolución de la información meteorológica.