¿La palabra dada?

En pleno sábado nuestra Alcaldesa celebró poner la primera piedra del nuevo Centro Cívico del barrio de Los Rosales en Ciudad Real. Tenía el acto todo un tufo electoral, aunque asistí por responsabilidad institucional y, sobre todo, por agradecer a los vecinos su inmensa paciencia.
La Alcaldesa en su parlamento dijo que estaban allí para “cumplir la palabra dada”. Se le olvidó que lo hacía con siete años de retraso. Una palabra devaluada por el tiempo transcurrido desde la promesa del 2008, una palabra arrancada por la insistencia de los vecinos y las varias propuestas de la Oposición.
En su disculpa insistió en que por la crisis económica no se había podido construir antes. Mala memoria la de la Sra. Romero, por no recordar que en este tiempo de crisis sí ha encontrado dinero para la rotonda del helicóptero o la remodelación de los jardines del Prado. No es la crisis, son las decisiones políticas adoptadas por quien ahora se presenta compungida y con cara de no haber roto un plato en su vida.
No me gustan las primeras piedras, siempre es una acción electoralista, una pérdida de tiempo pues faltan bastantes meses para su edificación, mobiliario, personal, actividades. Es querer dar al ciudadano una ilusión pasajera aunque luego vengan los lamentos y frustraciones. Expreso mi firme voluntad de no organizar primeras piedras  si soy Alcaldesa de Ciudad Real; ya está bien con las inauguraciones de rigor. Las obras institucionales deben celebrarse  a su finalización, no en  su inicio. En esta ocasión tenía prisa la Sra. Romero.
Por último, lamentar que el Centro Cívico de Los Rosales no vaya a ser igual que el de otros barrios de la ciudad. 
Nace con unos espacios mínimos, por ejemplo sin la biblioteca municipal de barrio, que yo considero prioritaria para la población  de ese joven barrio. ¡Tendremos que solucionarlo!