La vuelta de los toros a la plaza de Ciudad Real, que ha estado cerrada cinco años por la pandemia y las obras de rehabilitación, provocó el domingo una cascada de multas de aparcamiento por infracciones graves que se sancionan con doscientos euros.
La Policía Local ha levantado actas de sanción a veinticinco vehículos aparcados en pasos rebajados, áreas reservadas para discapacitados y sobre las aceras impidiendo el paso de los peatones.
Los más de seis mil espectadores que vinieron a los toros, algunos en autobuses desde distintos lugares de la provincia, colapsaron por la tarde el aparcamiento disuasorio de la zona de las antiguas viviendas de Padre Ayala, en la calle Julio Melgar con Ronda del Carmen, próxima al coso taurino.
La calle Sol, el mejor lugar para aparcar sin problemas
La única zona con espacio suficiente para aparcar sin problemas, cuando se producen estas aglomeraciones masivas de público a la plaza, es la calle Sol. La Policía Municipal asegura que lo ocurrido el domingo no es nuevo, aunque no hace muchos años que no se veía en ese barrio.
Los problemas de aparcamiento se dan siempre que hay espectáculos taurinos, ante la falta de infraestructuras para aparcar y la nula educación vial de muchos conductores, en muchos casos de otros municipios que no conocen la ciudad, llegan con el tiempo justo para el evento, y quieren aparcar al lado de la plaza.
La infracción grave de aparcamiento se sanciona con hasta doscientos euros de multa.
