Pregunta: ¿Qué significa la Pandorga para José Antonio López Rubio?
Respuesta: Significa, lo primero, un orgullo poder pertenecer a la pequeña familia de la Hermandad de Pandorgos. Lo segundo, una fiesta que para mí supone mucho a título de tradición y cultura de Ciudad Real porque vengo de una asociación de folclore que lo que hace precisamente es intentar preservar y rescatar nuestra cultura y tradición. En definitiva, es una oportunidad de darnos a conocer como ciudad, de dar a conocer nuestras costumbres, de dar a conocer nuestras gentes… es una fiesta muy importante.
P: Esta es otra forma distinta de mantener la tradición a la que se realiza desde la Asociación de Coros y Danzas Nuestra Señora del Prado
R: Sí, es otra forma. Esto me permite abrir el abanico de oportunidades para hacer lo que me gusta en ese aspecto de dar a conocer nuestra cultura y nuestra tradición al resto de España y del mundo.
P: ¿De dónde vienen esas ganas por mantener las costumbres?
R:Desde siempre a casi toda mi familia nos ha gustado la música y yo me he metido en esto un poco de rebote. Mi hija empezó en la asociación y a raíz de eso conocí gente que, al enterarse de que yo tocaba la bandurria, me animaron a participar en los actos. Una vez que lo pruebas ya no lo dejas.
P: ¿Cómo ha vivido la Pandorga durante su vida?
Evidentemente en esta situación va a ser la primera porque lo ves desde arriba. Siempre lo he visto desde abajo como una fiesta tradicional basada en la ofrenda a la Virgen del Prado en agradecimiento por los bienes recibidos. Pero también, en otros años como joven, he vivido la fiesta.
P: Antes de la Asociación de Coros y Danzas, ya formaba parte de hermandades de la Semana Santa…
R: Yo empiezo desde muy jovencito con la Hermandad del Silencio siendo costalero durante muchos años. Luego durante un par de años tengo un impasse. Y después vuelvo a retomar el tema de la Semana Santa en la Hermandad de Jesús Cautivo del barrio de Los Ángeles. De hecho sigo en la hermandad porque yo siempre he sido costalero, y sigo de costalero, colaborando con todo lo que he podido en todas las hermandades de las que he formado parte. En esta última, en la de Jesús Cautivo, llegué a pertenecer a la junta de gobierno dejando mi granito de arena donde pude.
P: Pertenecer a las hermandades de Semana Santa, ¿influye en la elección del pandorgo?
R: Yo no sé qué criterios siguen desde la hermandad para elegir a una persona como pandorgo u a otra. Imagino que influye la trayectoria de la persona, que debe ser definida para lo que es realmente la figura del pandorgo. En mi caso, no sé si habrá influenciado o no que pertenezca, o haya pertenecido a alguna hermandad, pero supongo que algo habrá ayudado para que hayan decidido que sea yo.
P: Desde sus primeros recuerdos de la Pandorga, ¿qué ha cambiado, mejorado o empeorado?
R: No creo que haya empeorado nada. Si alguna vez hay algo que ha salido mal o no tan bien, imagino que habrá sido por circunstancias particulares. Las cosas no se piensan para que salgan mal, se piensan para que salgan bien. En cuanto a qué es lo que veo, de momento no lo veo desde dentro para poder decir, pero desde fuera, para mi gusto, a la fiesta en sí no le pongo ningún pero.
P: ¿Qué le ha motivado para presentar la candidatura?
R: Son un cúmulo de cosas. Yo me encuentro ahora mismo en una edad que me apetece y además la Hermandad de Pandorgos cumple 30 años y la Asociación de Coros y Danzas 20. Gotita a gotita… al final di el paso.
P: ¿Qué le dijo su familia?
R: Esto es un cargo que conlleva una responsabilidad y, al fin y al cabo, un trabajo durante todo un año. Me dijeron que me lo pensara bien, ánimo y “al toro”.
P: ¿Desde cuándo tenía la idea de presentarse a Pandorgo?
R: No es pensarlo, es simplemente que dices: “oye pues yo podría ser, ¿no?”. Pero no te puedo decir si fue hace un año, ni dos ni tres; ves la fiesta desde donde yo estaba y te apetece. Este año ha sido el definitivo.
P: ¿Qué espera de este año?
R: Poder cumplir con el cargo que se me va a otorgar el día 31 de julio. Hacerlo lo mejor posible, y si puedo, potenciar y poner mi granito de arena en la fiesta y en la hermandad.
P: Antes de convertirse en pandorgo, ¿cómo veía la Hermandad de Pandorgos desde fuera?
R: Yo conozco mucha gente que ya ha sido pandorgo, que está dentro de la hermandad. Entonces no lo veo como una hermandad cerrada, sino como un grupo de gente conocida que pertenece a una hermandad y que tiene un objetivo en común. Lo veo como algo cercano, como una parte de mi vida.
P: ¿Alguna vez imaginó que llegaría a ser Pandorgo?
R: No, no, no. Pensarlo alomejor, pero imaginarlo nunca.
P: ¿Cómo se está preparando para el día 31?
R: Yo me siento muy arropado por la hermandad porque conozco a la mayoría de los pandorgos y tenemos muy buena relación. Espero disfrutar de las fiestas, de mi ciudad y que mi ciudad también disfrute de mí, que de eso se trata. En definitiva, intentar hacerlo lo mejor posible, siempre pensando en realzar la fiesta y la hermandad, y en llevar mi ciudad por todos los sitios.