Los cuatro semáforos con el sistema foto-rojo, un cámara que fotografía a los vehículos que lo superen en rojo, han empezado a multar este lunes 16 de octubre, una vez concluido el periodo de prueba de tregua de tres semanas.
“Saber el número de sanciones, si es que ponemos alguna, no es automático. Cada fotografía que se tome lleva una compleja tramitación e incluye la revisión por parte de un agente de la Policía Local”, ha explicado el concejal de Seguridad David Serrano a Lanzadigital.com.
El concejal también apela a la “reponsabilidad de todos para que no tengamos que multar”.
El sentido de estos semáforos, que funcionan en Madrid y otras ciudades del norte, es reforzar la seguridad en aquellos pasos de peatones con especial tránsito de personas, estudiantes y menores.
Mucho ojo a estos cuatro semáforos
Los cuatro foto-rojo se ha instalado en el semáforo de Puerta de Toledo (paso peatonal del parque y el colegio San Francisco de Asís), la Puerta de Alarcos y del parque de Gasset (cruce con el colegio Ferroviario), en la Ronda de Granada con Carlos Eraña y en la Ronda de Calatrava, cerca de la Escuela de Ingeniería Técnica Agrícola (ITA).
200 euros y 4 puntos menos
La sanción por rebasar un semáforo en rojo, ya sea controlado por un sistema automático o la imponga un agente, es de 200 euros y la consecuente pérdida de cuatro puntos del permiso de conducir.
El sistema es similar al que de las calles peatonales: una cámara que fotografía. Cuando se tramite la sanción cada multa irá acompañada por dos fotos de prueba antes y después de la línea de detención en las que se debe distinguir la matrícula y el semáforo en fase roja (nunca se remiten sanciones con una de las fotografías en fase ámbar).
El foto-rojo está conectado al Centro de Control de Tráfico y no hay previsión de que haya más de cuatro. En el periodo de pruebas han funcionado de forma correcta.