Un grupo de fruteros y verduleros del mercadillo de la capital provincial se han concentrado este viernes a las puertas del Ayuntamiento de Ciudad Real para pedir al equipo de Gobierno que les permita vender, al menos este sábado, el género que tienen ya adquirido para «que no se eche a perder».
El Ayuntamiento de Ciudad Real, como medida de prevención ante el coronavirus, canceló la celebración del mercadillo, que se monta cada sábado en el recinto ferial de La Granja, para las dos próximas semanas. Una decisión que ha pillado a los fruteros y verduleros de imprevisto y con todo el género comprado para venderlo en la capital.
«Solo pedimos que nos dejen vender este sábado lo que ya tenemos comprado», ha indicado Juan Carlos Iniesta, quien teme perder los más de 6.000 euros que tiene en género. «Son productos de primera necesidad y, encima, son perecederos, por lo que si no nos dejan venderlos se echarán a perder y tendremos importantes pérdidas económicas», ha añadido.
«Entendemos que la situación esté complicada, pero nosotros nos enteramos de esta decisión ayer por la tarde, cuando ya teníamos todo el género adquirido para venderlo en el mercadillo de Ciudad Real», ha apuntado, por lo que ha pedido al equipo de Gobierno que recapacite. «Las próximas semanas si no hay que montar el mercado no se monta, pero ya lo sabemos con antelación», ha destacado.
«¿Qué hacemos con el género, lo tiramos?, se pregunta Toñi Cogolludo, quien cada sábado monta su puesto en el mercadillo ciudarrealeño. «Estamos al aire libre y son productos de primera necesidad. ¿Por qué nos prohíben a nosotros y no se cierran las grandes superficies en las que también hay aglomeraciones y es un espacio cerrado?», continúa la frutera, lamentando que si no se abre el mercadillo sus frutas y verduras se echarán a perder.